El 1.500 español vivió anoche la jornada mas negra en unos Mundiales. Desde que el primer campeonato, celebrado en Helsinki en 1983, y luego una medalla de bronce, histórica, en los Juegos de Los Angeles de 1984, España siempre ha contado con al menos un especialista de 1.500 en todas las finales mundialistas, 11 en concreto, celebradas hasta el momento, y en todos los Juegos Olímpicos desde Los Angeles-84, excepto en los de Seúl-88. Pero en la final de mañana en Berlín no habrá ninguna camiseta roja entre los participantes.

Ni Juan Carlos Higuero, séptimo en la primera semifinal de ayer con 3.37.27, ni Reyes Estévez, octavo en la segunda, con 3.37.55, lograron el pase, rompiendo una de las tradiciones que más prestigio han dado al atletismo español. Sí que obtuvo el pase a la final, aunque fuera por tiempos, la vallisoletana Mayte Martínez en los 800 metros, al ser tercera en su semifinal con su mejor marca de la temporada, 1.59.72, pese a que una lesión que interrumpió la progresión que tuvo su momento culminante en el bronce de los Mundiales de Osaka (2007).