El ruso Marat Safin alargó los momentos de gloria que acumuló en las semifinales contra Andre Agassi para aplastar al argentino David Nalbandian y anotarse el título número trece de su carrera en la final del Masters Series de Madrid.

En sólo una hora y 52 minutos, fresco de ideas y pleno de imaginación, en un monólogo sin respuesta, Safin se impuso por 6-2, 6-4 y 6-3 a Nalbandian para ganar su segundo título esta temporada (Pekin) y aspirar con fuerza a uno de los puestos de la Copa Masters de Houston.

Agassi llegó a comparar a Safin con Andy Roddick y Roger Federer, y acertó con su tanteo. El ruso, para deleite de su entrenador Peter Lundgren, lleva camino de hacer un final de temporada de ensueño si continúa centrado únicamente en lo que sucede en la pista, donde sus golpes han vuelto a ser sencillos pero robóticos, sin respuesta.

Sus dos victorias en el tramo final en el Rockódromo valen oro. No solo por los puntos ganados para obtener el billete para Houston, pues ahora tiene 465 y se ha colocado sexto adelantando al británico Tim Henman.

Nalbandian contaba con ese ánimo destructor de Marat Safin, y también su entrenador, Eduardo Infantino. Cómo pararle era la cuestión. La respuesta, difícil, teniendo en cuenta que el ruso no baja de 200 kilómetros por hora con su servicio, y su revés a dos manos encuentra siempre el ángulo más mortífero.

Sus 14 directos, uno de ellos a 223 kilómetros por hora, y sobre todo la sangre fría para romper seis veces el servicio de Nalbandian, dejaron claro quien mandaba en la pista. El argentino tuvo que rendirse a la evidencia. "Enhorabuena Marat, has jugado un partido increíble", dijo. "Lo siento, pero no ha sido tu día", comentó Safin, ya con el trofeo en sus manos.