El Real Madrid se enfrentará hoy al Partizán en Belgrado en busca de su cuarto triunfo consecutivo dentro del grupo F, lo que le otorgaría el pase automático a los octavos de final de la Liga de Campeones esta misma noche.

El hecho de asegurar el billete de la siguiente eliminatoria, algo que tiene más que encarrilado, sería un tremendo alivio para el bloque de titulares, saturados de partidos en lo que va de temporada, que podrían descansar y tomarse a título de inventario los dos siguientes encuentros contra el Oporto y el Marsella.

Por contra, el Partizán de Lothar Matthaeus se juega las pocas opciones que le quedan para aspirar a la segunda plaza. Una derrota significaría su despedida de la competición y le complicaría incluso la lucha por la tercera posición, que da acceso a la Copa de la UEFA. Por ello, Matthaeus ha trabajado intensamente en el aspecto psicológico con sus hombres. Les ha tratado de convencer de que son perfectamente capaces de superar a los galácticos .

SENTENCIAR CUANTO ANTES

Queiroz no quiere sorpresas. La intención es sentenciar la clasificación cuanto antes. Por ello, tratará que su equipo funcione como tal y tenga actuaciones como las de Vigo u Oporto, en las que destacó su solvencia atrás y su pegada en ataque.

El Partizán tiene que arriesgar bastante más que en Madrid, buscar de manera más decidida el ataque, y el conjunto madridista dispondrá de espacios para la salida de Ronaldo, Raúl, Figo, Zidane y compañía.

El delantero brasileño recuperó su olfato goleador ante el Athletic y además jugó los 90 minutos. La afición se tranquilizó con el regreso del fenómeno , pero no olvidó el estallido de un Iker Casillas inconmensurable que espera tener menos trabajo en Belgrado que el sábado.

Con su buena situación liguera tras la victoria contra el Athletic, el pase a los octavos del torneo continental otorgarían un estado de ánimo aún más ideal al equipo de Queiroz, quien debe decidir si mantiene como pareja de centrales a Francisco Pavón y Raúl Bravo y devuelve a Iván Helguera a la medular en detrimento de Guti, o si sacrifica a uno de los jóvenes defensas y deja al cántabro atrás.

Matthaeus volverá a confiar en el meta Djordje Pantic, recupera al defensa nigeriano Taribo West, quien no estuvo en Madrid por problemas disciplinarios, y al artillero Andrija Delibasic, baja en la ida por sanción y que es el autor del único tanto del Partizán en el torneo.