Sigue el líder ejerciendo su particular dictadura en el grupo extremeño de Tercera. El Cacereño superó al Calamonte (2-0) con un gol en cada tiempo. Los tantos locales reflejaron lo acontecido en el barbecho del terreno de juego del Príncipe Felipe.
Propulsado como un cohete hacia el título, pleno de confianza por la ventaja que le consolida arriba, al grupo de Adolfo Muñoz le sigue bastando con su inmensa seriedad futbolística, especialmente en defensa, para liquidar sucesivamente los partidos, rara vez con estridencia, siempre con firmeza. No consigue un equipo cualquiera que tu rival se quede sin una sola oportunidad en más de 90 minutos. Y esto pasó ayer en la enésima repetición de la jugada. No es la primera vez que lo hacen los verdes. Y eso le señala como un grande de la categoría, como un bloque fiable 100 por 100 que está haciendo su trabajo a la perfeccción. Poco importan las limitaciones en la creación si todo lo demás funciona.
El Calamonte, un equipo bastante aseado, de buen trato del balón y de dos años de trayectoria seguida en Tercera de tremendo mérito, resistió como pudo. Apenas pasó apuros en la primera media hora. El exmeta del Cacereño Miguel intervino con un paradón a un lanzamiento de Carlos García, de nuevo un auténtico correcaminos en la banda derecha.
Un córner botado al segundo palo y a la larga por Nando Copete acabó en el tanto de cabeza de Asiel (min. 33). El defensa verde es una contínua amenaza en el juego directo, en lo que es el principal argumento ofensivo del Cacereño este año.
Kevin se encontró con Miguel poco después para rozar el 2-0, pero el hispano-argentino no pudo conseguir el tanto, por mucho empeño que le pusiera, como hace cada fin de semana.
El Cacereño, de nuevo con Pablo Molina en el lateral izquierdo (muy fiable, impecable el joven gaditano) seguía gobernando el choque ante un Calamonte en el que solamente amenazaba Vilorta, un futbolista menudo que no pudo concretar su calidad en lanzamiento alguno.
CON MINAYA / Para el segundo tiempo esperaba el guión de tantos otros choques. El Cacereño sin poder cerrar el choque y el fútbol que bajaba de calidad.
Se fue el hombre de más clase, Pucho, y entró la zurda prodigiosa de Fran Minaya. No esperó mucho el extremo, evidentemente recuperado ya. En su primer balón la puso en el fondo de la portería de Miguel de tremendo zapatazo. El Cacereño ha seguido ganando sin él, pero el murciano es necesario, imprescindible, por su talento y trabajo. Y ya expresó él mismo que está listo para jugar de inicio. Llegó a desesperarse, sí, pero está de vuelta Minaya. De muy saludable vuelta.
El encuentro concluyó sin sobresaltos con ese segundo tanto, con el líder más sólido que nunca y un Calamonte resignado a la derrota ante un martillo pilón transformado en equipo.
Cacereño 2
calamonte 0
3Goles: 1-0-Min. 33: Asiel. 2-0-Min. 74: Fran Minaya.
3Árbitro: Jesús Delfa. Tarjetas a los locales Elías y Pino y a los visitantes Bernabé, Perico, Álvaro y Carrasco.
3Estadio: Príncipe Felipe.
3Espectadores: 900.
3Cacereño: Camacho, Carlos García, Mansilla, Asiel, Pablo Molina, Elías, Aarón, Pino (min. 84, Nando González), Pucho (min. 73, Fran Minaya), Nando Copete y Kevin (min. 67, Artigas).
3Calamonte: Miguel López, Carlos, Ñoño, Pity, Saúl, Juanfe (min. 75, Mario), Enrique, Bernabé (min. 68, Caldera), Vilorta, Carrasco y Perico (min. 46, Álvaro).
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