La historia se repite en el Díter Zafra, un histórico del fútbol extremeño condenado en los últimos años a vivir al borde del abismo. Los problemas se multiplican y lo peor es que no son nuevos, repiten lo sucedido en temporadas anteriores. La campaña pasada, con el equipo peleando entre los mejores, comenzó una desbandada de futbolistas que provocó también la dimisión del entrenador antes de Navidad. Antonio Álvarez Ito se marcó aduciendo continuos incumplimientos en el pago de las nóminas de jugadores y cuerpo técnico, así como en los recibos de gasolina. Los mismos argumentos son los que el lunes, más de un año después, emplea Álex Martín, aunque la dimisión del técnico sevillano solo será efectiva «en el momento en el que se pague todo lo que se adeuda, no antes», según explicó en un comunicado.

Martín también se queja de la política de altas y bajas. Hasta ocho jugadores han abandonado el equipo desde el inicio de la temporada (Rosas, Alberto Sánchez, Jurado, Adrián Sánchez, Alberto Quesada, Dani Muñoz, Ismael o Peters) y serán más, según contó el técnico en Canal Extremadura Radio: «Edu Reyes ha pedido marcharse, Jurado se ha ido, Sosa tiene una oferta para marcharse, Ruano está casi fuera...». El presidente del club, José Dolores García, se defiende diciendo que algo tiene que ver Martín en el capítulo de altas y bajas, pues «de los diez jugadores que trajo de Sevilla solo quedan tres o cuatro y en algo se habrá equivocado él».

García, que la campaña pasada ya vivió esta situación con Ito, también aseguró estar dispuesto a abandonar el Díter si alguien le paga lo que él ha adelantado para que el club siga funcionando. Aseguró ayer además que a los jugadores solo se les adeuda media quincena de diciembre, además del mes en curso, lo que Álex Martín desmintió: «Es mentira, debe las mensualidades de noviembre, diciembre y parte de enero, además de la gasolina desde diciembre».

Con apenas 170 socios en una localidad de 17.000 habitantes, García cuenta que es muy difícil sostener el club, pero «muy fácil atacar en las redes sociales».

«Tenemos el compromiso para que los jugadores cobren hasta el último euro», añadió el dirigente, que no cree que la situación económica sea alarmante pues solo hay una mensualidad atrasada. Martín, sin embargo, ve difícil cobrar.

Y a los problemas institucionales, se unen los deportivos. Ahora el equipo es colista, sin margen. Hace un año estaba cerca del play off cuando Ito se marchó y fue ese colchón de puntos el que le permitió salvar la categoría.