Por mucho que cada vez aparezca como más imposible el reto segedano, el Díter Zafra tiene la aspiración de terminar la temporada de la mejor manera posible y con toda la dignidad del mundo en el ámbito deportivo. Después del marcador del pasado fin de semana en un complicado campo como el de Villanueva de Córdoba, donde comenzó ganando, llegó a ir perdiendo y acabó empatando, el reto es seguir confirmando que el equipo tiene pulso. Y eso que los imponderables no dejan de minar las opciones del bloque de Rafa Rus.
Esta semana hay dos nuevas ausencias forzadas por sendas sanciones. Ni Ochoa, que ahora parece que sí ha llegado a la quinta tarjeta amarilla, ni Iván Moreno, que acabó el partido en tierras cordobesas expulsado, van a estar a disposición del técnico. Si parece que van a inscribirse en el acta el goleador Raúl Castillo y el polivalente Encinar. Con todo, parece prematuro que ambos estuviesen en el once, salvo mejor criterio del propio Rus.
El conjunto azulino lleva más de cuatro meses sin conocer la victoria. La última, segunda del campeonato y primera a domicilio, la conseguía el 16 de octubre en Algeciras. Mientras, el Real Jaén viene de cambiar el chip y, tras unos titubeantes episodios mediada la competición, acumula ahora dos victorias consecutivas. Ganó en Alcalá por la mínima (0-1) y repitió guarismos el pasado fin de semana en el Nuevo La Victoria ante el Conquense (1-0). La llegada de refuerzos en el periodo de inscripción invernal parece que está dando los resultados que se perseguían.
El Díter volverá a jugar en su estadio el próximo jueves, ante el Aguilas y en partido aplazado en su día por la nieve.
