Dispuesto a terminar de una vez con la estéril, y por ello peligrosa, racha en la que se encuentra, viajó ayer el Díter de Rus hasta tierras murcianas. Esta tarde (17.00 h.) rinde visita a un Cartagena que en el presente ejercicio, y tras innumerables intentos, parece dispuesto a dar lo que su entorno, aficionados y demás esperan de él. Y es que el conjunto zafrense ha perdido los tres últimos encuentros que ha disputado y, merced a ello, se encuentra en el sótano de la tabla de clasificación, con las incomodidades añadidas que tiene una situación de éste género.

Una semana más, el entrenador azulino tiene que hacer frente a un nutrido capítulo de ausencias forzadas. Chumi vio la quinta cartulina amarila de su ciclo el pasado fin de semana, Iván Moreno fue expulsado tras ver dos tarjetas ante el Mérida... Y al margen de lo anterior, Iván Florido se ha descolgado a última hora por unas inoportunas molestias en el tobillo y Servando y Patri siguen convalecientes con sus lesiones de larga duración. El único argumento positivo hay que buscarlo en el alta de Pedro Gilarte, que formó parte ayer de la expedición segedana.

RUS MATIZA Aunque el de hoy podría ser uno de esos partidos en los que el Díter tiene mucho que ganar y casi nada que perder, su técnico, Rus, no es de esa opinión. "Si perdemos un cuarto partido consecutivo nos vamos a meter en problemas. Hemos trabajado, sobre todo en defensa, con la intención de hacer las cosas bien y volver con algo positivo que nos endulce el viaje".

En el Cartagena son bajas por sanción Merino y el santeño Sabino y a última hora se cayó, por un problema físico, Etxarri.