El Barcelona sufrió, pero terminó ganando en Francia al Roanne (79-89). El Unicaja, mientras, también cumplió con su papel en un nuevo éxito, aunque lo hizo con solvencia ante un rival más poderoso, el Milán (89-70), en un sensacional encuentro.

El Barcelona remontó un mal arranque de partido para imponerse con cierta solvencia para lograr una victoria que le permite seguir aspirando al primer puesto de su grupo en la Euroliga, a falta de una semana para recibir en el Palau al líder, el todopoderoso Panathinaikos griego.

Fue el Barcelona de menos a más en Clermont-Ferrand para derrotar al Chorale Roanne, un equipo entusiasta liderado por el estadounidense Marc Salyers, principio y final del equipo francés, máximo anotador del encuentro con 30 puntos.

El baloncesto atrevido y anárquico del Chorale desarboló en los primeros minutos al equipo catalán, que encajó un parcial de 7-0 en el primer cuarto. Sólo el poderío de Kasun y de Trías sostuvo al Barça antes del descanso.

Víctima de la explosividad de Salyers, el Barcelona se perdió en la pista francesa durante la primera parte. Pero después pudo rectificar.