Cuatro temporadas que para un club como el Deportivo Don Benito han sido como deambular por el desierto. Después de ascensos a Segunda B y de estar un año sí y el otro también peleando por estar arriba, estas cuatro campañas sin post temporada no han sido fáciles, pero el resurgimiento rojiblanco puede llevarle hasta el campeonato.

Después de la decepción de la temporada pasada, los objetivos para esta eran claros: el playoff. Hay plantilla y cuerpo técnico para más, pero se prefirió desde el principio poner metas reales y de momento se van consiguiendo. Aunque estaba claro desde hace dos jornadas que la fase de ascenso no se podía escapar no es menos importante lo que se consiguió el pasado domingo. «A partir de ahora toca soñar», declaraba Ricardo Durán tras el encuentro ante el Aceuchal (2-1).

El lateral izquierdo es uno de los veteranos de la plantilla y sabe el gran esfuerzo que se ha hecho en las últimas temporadas tanto dentro como fuera del campo. La labor de los despachos, con el saneamiento de la deuda y con la confección de una plantilla de garantías, ha sido clave también para que el equipo esté a un punto del liderato.

El equipo ha respondido en las últimas jornadas con una gran racha de resultados, pero no quieren quedarse aquí. De momento toca saborear la victoria (en el sentido literal de la palabra) y después pensar en el Valdivia. «El míster nos dijo que si nos metíamos esta semana nos regalaba unos gambones el jueves, así que bastante contentos», recuerda Durán.

El pasado domingo el Aceuchal no fue un rival fácil y el lateral izquierdo calabazón destaca la fortaleza, sobre todo mental de sus compañeros para remontar. «Desde la jornada en la que jugamos con el Cacereño nunca habíamos empezado perdiendo en casa y la verdad es que hemos reaccionado bien y hemos apretado bastante y le ha dado la vuelta a la situación».

Ahora toca pensar el partido de Valdivia. Los vecinos necesitan también los tres puntos para alejarse de la zona peligrosa. En Don Benito saben que es una salida complicada por el rival y el estado del campo. «Sabemos que no es un campo que no está en buenas condiciones para ningún equipo, sabemos que va a haber mucho juego directo y los tres puntos allí se los va a llevar el equipo que menos errores cometa».

Así una vez conseguido el objetivo principal toca soñar y con el campeonato tan cerca los rojiblancos se conjuran para luchar hasta el final. «Tenemos claro que para ser campeones tenemos que sacar los nueve puntos, tenemos prácticamente el mismo calendario del Cacereño, va a estar emocionante hasta el final y yo creo que hasta el último partido no se va a decidir nada», asegura Ricardo Durán.

En caso de ganar o empatar los rojiblancos igualarían su mejor racha de esta liga de partidos sin perder, que precisamente coincidió prácticamente con los mismos rivales en la primera vuelta.