Son amigos. Han compartido numerosas concentraciones con las selecciones junior y absolutas y ahora tienen el enorme privilegio de compartir la representación española en la NBA. El extremeño José Manuel Calderón y el catalán Pau Gasol mantienen el contacto y uno le preguntó al otro en muchas ocasiones sobre aspectos de la competición en la que ahora debuta.

Además, los dos están al alza claramente, aunque de distintas formas. El recién llegado Calderón estrenó el viernes por la noche su nueva condición de titular en los Toronto Raptors, que vencieron a los Boston Celtics por 93-83. 24 horas después, Gasol y Memphis rompían la imbatibilidad de Houston Rockets (88-84) en otro notable encuentro (16 puntos y 6 rebotes).

MIRANDO AL FUTURO Ambos se verán las caras el próximo 30 de noviembre en el Air Canada Center, una cita para la que ya están ansiosos. Con un mes de competición se podrá juzgar si ambos van cumpliendo las expectativas. En el caso del rookie de Villanueva de la Serena, ver qué papel tendrá en el equipo, si base principal o recambio habitual de Mike James; en el del ala-pívot, si ha cumplido con la misión de liderar con mayor solidez a los Grizzlies. El otro partido que jugarán será el 21 de febrero del 2006, éste en Memphis.

De momento, todo son halagos para ambos. La opinión coincidente en el vestuario de Toronto es que es muy fácil jugar con Calderón, pese a que no domina del todo el inglés. Les sorprende que en una liga tan individualista, él anteponga pasar al compañero a tirar a canasta, muy al estilo europeo. Además, su fortaleza física le exime de tener los enormes problemas que sufrió Raúl López en sus tres temporadas en Utah Jazz. Anoche el villanovense tuvo una nueva ocasión de mostrarse en el amistoso en Ohio frente a Cleveland (0.00 hora española).

Para Gasol es un año crucial. Tras haber firmado una extensión de contrato que le garantiza 70 millones de dólares por seis temporadas, ha sido señalado por todos como el hombre que debe guiar a la franquicia de Memphis a cotas mayores. Seguramente no se le pidan más puntos o rebotes, sino un mayor carisma personal acompañado de una superior implicación defensiva. Parece haberlo captado. Tras vencer a Houston dijo: "creo que jugué un buen partido, especialmente en el apartado defensivo para controlar las acciones de Yao Ming y forzarle a que cometiese personales". Los Grizzlies han ganado cuatro de sus cinco partidos de preparación.