Los dos sherpas, Sonam y Dawa, que acompañaban a Carlos Pauner, Juanito Oiarzábal y Tolo Calafat en el Annapurna (8.091 metros), y que no quisieron bajar en el helicóptero ayer, acaban de regresar al campo base exhaustos pero en buenas condiciones de salud.

Según informa la expedición, a Sonam y Dawa se les había roto la antena del walkie y por ese motivo no habían podido comunicarse con los montañeros.

Pauner y Oiarzábal, junto a Javier Pérez, que tenían previsto tomar mañana un helicóptero hasta Katmandú para regresar a España, lo iban a retrasar para tratar de localizarlos.

Ambos se encontraban en el campo 4 junto con Juanito, el rumano Horia Colibasanu y Carlos cuando el helicóptero que había intentado rescatar a Tolo llegó hasta ellos.

Sonam y Dawa rechazaron ser trasladados hasta el campo base porque les daba mucho miedo bajar colgados en el vacío agarrados sólo por una cuerda al helicóptero y por eso decidieron que bajarían por su propio pie.

Según las lógicas previsiones anoche debían haber llegado al campo base pero no fue así.

En un principio se pensó que se habrían quedado a dormir en algún campo y que bajarían hoy por la mañana, algo que no ha sucedido cuando en el Himalaya son las 23.30 horas, según informa la expedición de Carlos Pauner en una nota de prensa.