La gimnasia española, sin haber conseguido aún ninguna medalla, sigue haciendo historia al firmar ayer Elena Gómez el octavo puesto (37,299) en la final, que es el mejor obtenido en cualquier edición de los Juegos en esta especialidad deportiva.

Ya Rafael Martínez hizo lo mismo el miércoles en el apartado masculino con un quinto lugar en su final.

En mujeres, las novenas posiciones de Esther Moya en Sydney y de Sonia Fraguas en Barcelona-92 eran hasta ahora la cima en este deporte.

Elena Gómez y el seleccionador Jesús Carballo abandonaron ayer el Pabellón Olímpico, sin embargo, pensando que hubiera sido posible estar algo más arriba.

La gimnasta española, obtuvo en la final de ayer incluso mejor nota que entonces (37,299 por 37,286), pero el podio --compuesto por la estadounidense Carly Patterson, la rusa Svetlana Khorkina y la china Nan Zhang, oro, plata y bronce-- estaba caro.