En el análisis que hacía el entrenador del Mérida, Eloy Jiménez, al final del partido, reconocía que había sido «muy igualado en la primera parte, nosotros muy bien a balón parado, ellos bien después, pero los controlamos. Felicitar a mis jugadores porque ha sido un gran partido ante un gran rival que está ahí por méritos propios». En cuanto a que los tres goles fueran a balón parado, contó que «sabíamos que el Marbella es un equipo que tiene dificultades a balón parado y lo hemos trabajado durante la semana». A nivel individual, el entrenador destacó que el debutante Lobato «ha estado bien y Mandaluniz se encontraba con confianza para jugar sin máscara». Tras estas dos victorias consecutivas, ante dos de los tres primeros clasificados, Eloy mantiene el mismo discurso, «partido a partido, nada más, nos queda lo más difícil. Hay que seguir con la línea de trabajo y con humildad».

Por su parte, el entrenador del Marbella, Mehdi Naftí, explicó que «a nivel de resultados el partido es malo, pero a nivel de juego, mi equipo ha hecho un buen partido».