Ahí tienen a Enrique, triunfando ya en el Cádiz. Los aficionados del Cacereño se preguntan ahora si fue buena la decisión de Félix Campo de vender el jugador de Azuaga en el mercado invernal.

¿Mereció la pena? Al final de temporada lo veremos, pero no parece, en principio, que el Cacereño haya salido bien parado de la operación, deportivamente hablando. El dinero que ha ingresado puede ser muy poco en comparación con el desastre que puede venir, si es que el equipo desciende a Tercera División, algo que nadie quiere pero que puede convertirse en realidad.

Enrique era, sin duda, uno de los jugadores más determinantes del grupo IV de Segunda División B. Su marcha ya la está notando el equipo extremeño, y más teniendo en cuenta que no es precisamente en los hombres punta donde el equipo tiene más efectivos, ya que ni siquiera en enero se han fichado jugadores.

Y mientras ello ocurre, el bueno de Enrique demuestra su enorme talento con una doble acción determintante, provocando una expulsión y un penalti decisivo en el último minuto. El extremo triunfa y su antiguo equipo está situado ya en zona pantanosa. Mal momento. Malos tiempos.