CLINICAS RINCON - 85: Michael Williams (9), Adrián Fuentes (-), Paulo Sergio Prestes "Paulao" (18), Pablo Movilla (2) y Skboldebra (14) --cinco inicial-- Rai López (10), Michal Chylinski (25), Ernesto Díaz (2), Carlos Cobos (-), Ale Navajas (-) y Faverani (5).

CACERES 2016 - 81: Adrian Moss (24), Tomás Bellas (9), Dan Cage (15), Diego Guaita (9) y Mantas Ruikis (8) --cinco inicial-- Chus Poves (-), Rod Brown (16), Lucio Angulo (-).

ARBITROS: De Lucas y Albacete, de Castilla- La Mancha. Sin eliminados.

MARCADOR POR CUARTOS: 26-16, 45-43, 59-58 y 85-81.

El Cáceres 2016 rompió su buena racha de seis victoria seguidas y pinchó en Rincón de la Victoria (Málaga), donde perdió por 85-81 frente al Clínicas Rincón en un disputado encuentro sumamente igualado pero en el que finalmente los locales se impusieron.

Las bajas y los problemas físicos acabaron pasando factura al equipo de Manuel Hurtado: Wayne Simien está en EEUU por la enfermedad de un familiar, Juan Sanguino tampoco jugó por una rotura fibrilar y jugadores como Lucio Angulo, Rod Brown y Chus Poves arrastraban molestias después de una semana en la que no habían podido completar los entrenamientos. Pese a todas estas dificultades, el equipo dio la cara durante los 40 minutos e incluso forzó un final igualado pese a que estaba en evidente inferioridad física respecto a su oponente.

El equipo cacereño viajaba a Málaga como octavo clasificado, con trece triunfos y diez derrotas, las mismas que el Clínicas Rincón, en la sexta plaza y rival directo en la lucha por conseguir el objetivo de entrar en la fase de ascenso.

BUENA IMAGEN Se notó que el conjunto extremeño se presentaba en Andalucía con la moral de su buena racha de seis victorias consecutivas, lo que convertía en el mejor de la competición en la segunda vuelta y un rival muy respetado para los malagueños.

En los primeros minutos del primer cuarto el partido estuvo muy igualado. Los cacereños llegaron a ponerse por delante con 7-8 gracias a un juego muy rápido y una defensa en zona.

Los locales se veían mermados en parte por los balones que perdían y también por el acierto del pívot argentino Diego Guaita y la puntería encestadora de Adrian Moss y Dan Cage.

Poco a poco el Clínicas recuperó su acierto, llegó con más facilidad a la canasta rival y fue mandando en la cancha y en el marcador (26-16).

En el segundo parcial hubo pocos cambios en el juego de ambos equipos, ya que los malagueños mantuvieron su dominio y llevaron a remolque al cuadro visitante.

ANGULO, SIN FUELLE El jugador del conjunto extremeño Lucio Angulo salió a la cancha pero, pese a esforzarse, no lograba sacar al equipo hacia adelante en el electrónico y además se marchó a los pocos minutos al mostrar que no estaba totalmente recuperado de la rodilla que se golpeó en el último encuentro disputado ante el Rosalía.

A falta de tres minutos para el descanso, el marcador iba 34-22, y aunque los malagueños no perdían empuje, progresivamente el Cáceres 2016 fue haciéndose un sitio, luchando al máximo por cada balón, y acortó distancias en el electrónico hasta el 45-43 del final de este cuarto.

En el tercer parcial el Cáceres 2016 mantuvo su nivel y siguió de cerca al Clínicas, acosándolo constantemente, aunque a falta de tres minuto para el final de este cuarto los malagueños ampliaron su distancia y se pusieron con 56-49.

Pero el conjunto visitante no perdía de vista a su rival, Angulo volvió al equipo pese a estar renqueante y el Cáceres 2016 comenzó una escalada en la que a falta de un minuto para el fin de este cuarto puso electrónico en 56-58, si bien al final los locales volvieron a adelantarse con 59-58 tras un triple del jugador más acertado, Michal Chylinski.

El último parcial fue el más trepidante y disputado, con un fuerte ritmo por parte de ambos, en especial con un Cáceres 2016 que exhibió su veteranía y un equipo malagueño espoleado por su afición.

Los hombres de Paco Aurioles estuvieron mas serenos que los del conjunto cacereño, que jugaron los minutos finales con mucha prisa y precipitación.

A falta de cinco minutos, el marcador estaba en 70-70 y todo estaba todavía por decidir. De hecho, gracias a un estratosférico triple de Cage, a falta de un minuto se puso en 82-81. Al final, el mayor acierto de los malagueños bajo aros decidió y con la última canasta el partido quedó en 85-81.