La plantilla del Cáceres Patrimonio de la Humanidad hizo ayer un alto en el camino para disfrutar de un entrenamiento especial, en el que los jugadores compartieron pista con miembros y familiares del colectivo Aspainca. ‘Jugadores por un día’ convirtió la cancha del Multiusos en un crisol donde Marcius, Riauka, Sergio Pérez y demás compañeros parecían auténticos gigantones al lado de abuelitas y niños que también se animaban a lanzar a canasta. Las risas y el buen rollo se apoderaron del recinto deportivo gracias a una actividad desarrollada por la Obra Social de La Caixa y la asociación cacereña de la lucha contra el cáncer. Primero calentamiento para evitar lesiones y después, sesión de lanzamientos a canasta, con Ñete Bohigas ejerciendo de técnico, lógico, pero también sus ayudantes y jugadores.
Mientras, el Cáceres sigue preparando el partido del viernes en San Sebastián ante el Retabet.es GBC, el tercero seguido que jugará a domicilio. Los dos anteriores se han saldado con victoria, permitiendo al conjunto verdinegro soñar con la lucha por el play off. El conjunto donostiarra, que es tercero empatado con el primero, perdió en el Multiusos (73-58).
