La delegación española que asistirá a los Juegos Olímpicos de Atenas complementará la seguridad prevista por la organización griega con un contingente de policías españoles que velará por la salvaguarda de deportistas y dirigentes. Es la primera vez que España adopta esta medida en unos Juegos, en un momento de agitación internacional por los atentados terrorista del 11 de marzo en Madrid.

El anuncio fue hecho ayer por el presidente del Comité Olímpico Español (COE), José María Echevarría, durante la asamblea de este organismo celebrada en Madrid. El contingente de seguridad español estará compuesto por miembros del Cuerpo Nacional de Policía, cuyo número, en un principio, se situará en torno a la docena. Sin embargo, fuentes oficiales consultadas ayer por este diario no descartaron que el número de efectivos destinados a la seguridad aumente significativamente de acuerdo con las necesidades que se vayan evaluando hasta el momento del inicio de los Juegos, el próximo 13 de agosto.

REMO, HIPICA Y VELA El ámbito de actuación de los miembros de los servicios de seguridad españoles no se solapará con las instalaciones y edificios cubiertos ya por la seguridad de la organización, como es el caso de la villa olímpica o de los estadios y pabellones deportivos. Los apartamentos alquilados en las cercanías de la sedes de remo, hípica y vela, la Casa de España y los hoteles donde se alojarán los presidentes de las federaciones españolas y los invitados del equipo serán los escenarios en los que trabajará el operativo de seguridad español. "El equipo español se apoya en la seguridad general de la organización, pero hay que reforzarla un poco para que estemos todos más cómodos", aseguró ayer el presidente del COE, José María Echevarría, que admitió la preocupación.

El secretario de Estado para el Deporte, Jaime Lissavetzky, se reunió el pasado martes con representantes del Ministerio del Interior, Ministerio de Asuntos Exteriores, Centro Nacional de Inteligencia y COE para diseñar el dispositivo de seguridad de Atenas y de la próxima Eurocopa de fútbol en Portugal (12 de junio al 4 de julio). "La propuesta es que, al igual que sucede con delegaciones de otros países, nosotros podamos tener una seguridad adicional", aseguró ayer el responsable deportivo.