La selección española recuperó este jueves la sonrisa con un entrenamiento que comenzó con juegos y con risas en el conjunto nacional, en su última sesión previa al partido de su debut en el Mundial de Rusia 2018 contra Portugal en el escenario del encuentro, el imponente estadio Fisht de Sochi.
Después de dos días de agitación, con la destitución de Julen Lopetegui y el nombramiento de Fernando Hierro, la selección retoma poco a poco la normalidad, pero sin apenas tiempo, porque este mismo viernes ya espera su primer compromiso en el Mundial, al que enfocó directamente en la sesión que completó el equipo esta misma tarde.
El segundo y último entrenamiento para preparar ese partido del nuevo seleccionador nacional, que dispuso de nuevo de todos sus efectivos desplazados a Rusia, 25 jugadores, incluido Dani Carvajal, que será baja para el estreno ante Portugal, pero que ya se ha ejercitado en los tres últimos días junto al resto de compañeros.
El lateral derecho, lesionado muscularmente en la final de la Liga de Campeones del pasado 26 de mayo, ya ultima su puesta a punto, no se quiere asumir ningún riesgo ante Portugal y estará listo para su reaparición en la segunda jornada del torneo, el próximo día 20 frente a la selección de Irán en Kazán.
El resto de la plantilla está a disposición de Fernando Hierro, que contó con todos en el entrenamiento, incluidos Rodri Hernández y Jesús Vallejo, que no figuran en la lista definitiva de 23 jugadores para el torneo, y que ya dispone en Sochi de los tres nuevos miembros del cuerpo técnico de la selección española absoluta: Carlos Marchena, Julián Calero y Juan Carlos Martínez.
