Juan Carlos Ferrero desea fervientemente que por fin sea su hora y que pueda inscribir en su palmarés un título importante. Ganador de dos Masters Series, Roma en 2001 y este año en el de Montecarlo, semifinalista dos veces de Roland Garros (2000 y 2001) y finalista este año, Ferrero tiene ahora su oportunidad para pasar a la historia.

"Ojalá toque ganar ya, porque acabar así el año sería algo espectacular", dijo Ferrero, "sobre todo después de vencer también en Hong Kong en pista rápida".

"Para mí estar en la final supone un pinchazo de confianza enorme", aseguró. Sobre su rival, Ferrero aseguró que será "muy difícil de batir". "Es el mejor defensor del ATP", señaló al referirse a su formidable resto, "y además acaba de terminar la temporada como número uno del mundo".