El Mérida quiere apelar al espíritu ofrecido en su último encuentro disputado en el Romano, donde superaron por 4-0 al líder. El Ecija, esta tarde a las 17.00 horas, pondrán a prueba la mejoría del equipo emeritense en el Romano.

El entrenador del Mérida, Fabri González, aseguró tras la goleada al entonces líder del grupo, Linares, que "este partido debe ser la maqueta donde mirarnos", en la previa a esta jornada, Fabri reconocía que "ese partido nos dio una cierta credibilidad a la plantilla, sobretodo desde el punto de vista anímico, pero también la semana pasada hicimos un gran partido muy bien competido y bien jugado como para haber ganado con ventaja". El técnico emeritense quiso dejar clara su "fe ciega en este equipo" y aseguró "estar deseando que pase este atolladero de lesiones, sanciones, de errores que no son nuestros y estoy seguro, si ayudamos entre todos y no dejamos morir a este equipo, que vamos a coger una marcha imparable". A pesar de esta gran confianza en su plantilla, Fabri reconoció que "el equipo está atravesando unas circunstancias poco positivas, con muchas bajas, tanto para jugar como para entrenar y afrontamos este encuentro sumamente mermados con cinco bajas muy importantes" (Granada y Segovia por lesión, Sabino, Lupidio y Chupri por sanción) aunque el técnico está convencido de que "los que van a jugar van a competir igual de bien". Con respecto al Ecija, que no tendrá al delantero Luna, lo define Fabri como "un equipo típico de Segunda B, que no juega, corre, presiona, destruye y aprovecha sus ocasiones".

SOBRE LOS ARBITROS De otro lado, Fabri González ha querido puntualizar sus palabras con respecto al estamento arbitral, tras lo acontecido en Puertollano, Fabri asegura que "no quiero que nos den nada, porque no nos hace falta, ni que nos lo quiten", el entrenador aboga "porque los árbitros sean profesionales en Primera y Segunda, y semiprofesionales en Segunda B, deben cobrar más que los entrenadores, para así también poder reclamarle responsabilidades, son los que tienen que impartir justicia y no montar espectáculos". Con esto el técnico quiso dejar claro que "no tengo nada en contra de los árbitros ni rajo de ellos".