DATO EXTREMADURA: Dapo (16), Infantes (4), Stevenson (8), Wells (2), Hlede (3) --cinco inicial-- Milovanovic (2), Aragonese (9) y Peláez (8).

HONDARRIBIA IRUN: García (2), Checa (4), Jansone (20), Shameka (19), Robinson (2) --cinco inicial-- Quintero (6), Veselovski (6), Suárez (0), Tamane (18) y Mallabiabarre (2).

MARCADOR POR CUARTOS: 13-14, 31-29 (descanso), 40-51 y 52-79 (final).

ARBITROS: Zumajo y Vázquez. Eliminaron por faltas personales a la local Stevenson.

INCIDENCIAS: Tercera jornada de la Liga Femenina.

Demasiado castigo para el Extremadura Dato, que cayó derrotado por un contundente 52-79 que no refleja en su totalidad lo sucedido en la cancha. No obstante, el Extremadura, equipo con el menor presupuesto de toda la liga, tendrá que sufrir para mantener la categoría en la máxima categoría del basket femenino, aunque de momento el primer asalto, con tres partidos para abrir boca en un espacio de ocho días, lo ha saldado con buena nota, teniendo en cuenta el nivel de los equipos a los que se ha enfrentado.

El partido ante las de Irún estuvo muy igualado durante los dos primeros cuartos. En los primeros diez minutos hubo continuas alternancias, aunque ninguno de los dos equipos consiguió escaparse más allá de los tres puntos.

En el segundo cuarto siguió la misma tónica y aunque Hondarrabia conseguía distanciarse de cinco (17-22), un extraordinario parcial de 7-0 en los cuatro últimos minutos permitía a las pacenses llegar al descanso con ventaja en el electrónico (31-29), que era por cierto la máxima diferencia que adquirirían las pacenses en todo el encuentro.

POR DELANTE El Extremadura Dato empezó la segunda parte con ventaja en el marcador pero la perdería rápidamente tras una impresionante racha visitante comandadas por Jansone y con un 0-4 de inicio. Con 31-33, Jansone volvía a anotar en la siguiente jugada y acto seguido García robó un balón montando una contra para asistir una vez más a la alero, que volvió a martillear el aro local.

En el tercer periodo las vistitantes empezaron a tomar una renta importante, pero el público local confiaba en la enésima remontada de las de Fernando Méndez, aunque en esta ocasión todo se ponía más cuesta arriba, entrando en el último cuarto con once de desventaja (40-51).

En los diez últimos minutos, a las pacenses no les funcionó ni la zona ni mucho menos la efectividad en ataque, siendo estos aspectos por donde definitivamente se escaparía el encuentro. Al final, las vascas se pasearon por La Granadilla.