Todo el entorno del Extremadura estaba concienciado de la dificultad del primer tramo liguero en el estreno en Segunda. Un punto de 9 posibles. Sabe a poco por las sensaciones que en diferentes tramos de los partidos ha dejado el conjunto de Sabas en campos complicados como el Tartiere o El Molinón y ante tres rivales que buscan claramente ser de playoff como Oviedo, Depor y Sporting. Pero la realidad es que, al Extremadura, se le resiste la primera victoria. Sabas ya anunció que ganar en esta categoría «es dificilísimo». Y no le falta razón. El Extremadura pone garra, entrega, ahínco y resistencia, pero no le ha llegado, de momento, para sorprender a sus oponentes.

Sin embargo, no desespera, y ahora trata de pasar página para centrarse únicamente en el partido ante el Granada del domingo a las 18.00 horas. El Extremadura busca argumentos y los encuentra en la necesidad de que sus fichajes den un paso al frente. Hasta la fecha, jugadores de la pasada campaña como Manu García, Enric Gallego, Alex Barrera o Alex Díez están siendo los más destacados del equipo. Uno de ellos, el portero Manu García, trata de ver el vaso medio lleno y envía un mensaje de tranquilidad. «Sabemos que llevamos un punto de nueve y que eso es lo que cuenta, pero la sensación en el día a día es que somos mejores de lo que refleja en la tabla. Tenemos que ser conscientes de que han llegado jugadores nuevos en la última semana y que el club apenas ha tenido un mes para adaptarse al cambio de categoría. Si ganas, todo se ve de otra manera y la mejor manera de adaptarse a la Segunda es ganando algún partido para tener más tranquilidad y normalidad», reflexiona.

El Extremadura es uno de los ocho equipos que no han ganado todavía en liga.

El meta sevillano se está ganando a pulso la titularidad pese a los fichajes de Casto y Álvaro Fernández. «He llegado tarde a esta categoría y tengo que aprovecharla al máximo. Entiendo que esté siendo protagonista, pero me gustaría que fueran ahora los delanteros. Claro que estoy contento por mi trabajo, pero a mí, como a todos, nos gusta ganar».

Las malas noticias se acrecientan en la enfermería para el Extremadura. Los de Sabas perderán para varios meses al central Borja García, quien curiosamente regresaba a los terrenos de juego en El Molinón tras estar más de un mes en el dique seco en la pretemporada. El futbolista cántabro apoyó mal su pierna derecha en un salto y sufre una rotura de maleolo externo y ligamento deltoideo, junto a la cabeza baja del peroné. Ayer estuvo sometiéndose a más pruebas.