En pleno ‘Tourmalet’, como señala el técnico Carlos Díaz --tras enfrentarse en las últimas jornadas, incluida esta, a los tres grandes favoritos-- recibe esta noche (20.45 horas) el Extremadura Plasencia al Fundación Lucentum Alicante. Llegan los visitantes tras perder de manera sorprendente en casa ante el Agustinos Leclerc de León (66-77).

También suman dos derrotas consecutivas los locales, ante Covirán Granada y Morón, este último en un doloroso correctivo. Ese 104-71 resultó un encuentro para olvidar.

Quieren sin embargo olvidarla lo antes posible y para ello el entrenador local demanda el apoyo de la afición: «La necesitamos. Hemos sufrido lesiones en este Tourmalet, pero vamos a dar un paso al frente». Para ello espera que el equipo sea esta noche capaz de dar su mejor versión.

KINNEY, DUDA / La única duda que queda por desvelar es saber si el norteamericano Erik Kinney podrá jugar. Probablemente no, ya que tras someterse a una cirugía menor para tratar de restablecer su codo tras una bursitis, no está totalmente recuperado y quizás se le reserve para la jornada del próximo sábado, que se jugará de nuevo en casa ante L’Hospitalet.

Del Alicante sobresale el veterano base Pedro Rivero (38 años), que supone una gran amenaza desde el perímetro. Su máximo anotador es Álvaro Lobo, muy peligroso en el uno contra uno. Bajo tableros, el poder del maliense Sibide Boubacar, que con sus 2,06 se medirá con e Seydou Aboubakar en un duelo que se prevé apasionante.

El base local Adrián Fuentes jugó allí dos temporadas (2014-15 y 2015-16) antes de pasar al Basket Navarra, desde donde llegó a Plasencia.

Se trata, en suma, de un partido importante que servirá para medir la recuperación del cuadro local, que es muy consciente del potencial de su oponente, pero está dispuesto a batallar hasta el último balón.