Una sanción de 42 segundos privó a Fernando Torres de meterse entre los diez primeros de la general final de la Vuelta a Albufeira (Portugal), que ha finalizado ayer en la localidad que da nombre a la carrera, y ha visto enfundarse el maillot amarillo al gran dominador de la prueba, Bruno Neves, del equipo Milaneza. Tras los dos sectores disputados el sábado, el de Llerena se encontraba decimoquinto en la general, a tan sólo 10 segundos del líder, pero con el castigo sufrido ayer, Torres acaba trigésimo sexto, a un total de 42 segundos de Neves.

Todo ello ha venido acarreado porque, en el transcurso de la segunda y última etapa, Torres ha realizado una breve parada y el juez de la prueba ha entendido que estaba aprovechándose de un abrigo prolongado por parte del coche de su equipo. Las consecuencias no sólo han venido en forma de penalización con segundos, si no que Fernando Torres ha sido multado con 50 francos suizos y su equipo, el Extremadura-Spiuk, con 100.

Por su parte, el mejor corredor del equipo extremeño en la etapa fue finalmente Juan Carlos Fernández, que intentó disputar el sprint final, pero no pudo con la rapidez de Bruno Neves. Mientras, Javi Ramírez acabó duodécimo en la general final y el Extremadura-Spiuk fue cuarto en la clasificación por equipos, con el mismo tiempo que el vencedor, el Barbot-Halcon.