CACERES 2016 85: Sam Jones (13), Kelvin Peña (18), José María Panadero (8) Luis Gruber (14), Harper Williams (11) --cinco inicial-- López Valera (2), Ricardo Busciglio (8) Vissilios Kitsoulis (6), Félix Ortiz (5).

IMAJE SABADELL 74: Marc Sola (16), Xavi Ventura (8), Sergi Pino (11), Manuel Guzmán (12), Francesc Cabeza (16) --cinco inicial-- Xavi Girao (5), Xavi Costa (4), Marc Sobrepera (2), Angel Valdez (0).

MARCADOR POR CUARTOS: 25-26, 43-41 (descanso), 65-60, 85-74 (final).

ARBITROS: Alonso y Soriano. Mal, intentando compensar al final. Sin eliminados.

La fiesta continúa. El Cáceres sigue firme. Y sigue ganando partidos, que es lo que realmente le interesa. Gustándose o sufriendo, este equipo tiene algo especial para la categoría. En una semana en la que se ha confirmado que la ciudad albergará la fase final de ascenso, ¿hay alguien que dude sobre las condiciones de este grupo para, al menos, pelear por el ascenso? Pocos.

No fue, en efecto, una exhibición, pero sí una muestra de poderío. El Sabadell, liderado por el exverdinegro Francesc Cabeza y el explacentino Marc Sola, opuso una resistencia real, pero terminó rindiéndose a la eficacia local, cuyo secreto son las individualidades mezcladas con el espíritu de grupo. Sin duda, la mejor combinación posible, el mix más explosivo, el ganador.

TODOS PUEDEN No hace falta que el jefe Williams esté gafado ante el aro; ni que haya que esperar las ráfagas imparables de El Pollito ; o que Sam Jones se pierda en personales estériles; que Sanguino esté lesionado o que a Panadero sus molestias le dejen ser el que es. Sin ellos a pleno rendimiento, este conjunto también puede hacerse valer. Y puede vencer. Gruber soluciona un encuentro en tres acciones puntuales, de ala-pívot de inmensa clase; Busciglio te arranca un par de pases, un espíritu defensivo encomiable y termina haciéndote florituras; López Valera, Félix Ortiz y Kitsoulis ejercen de secundarios con ejemplaridad...

El partido, en fin, no fue fácil. En los dos primeros cuartos, los catalanes, que ya no son el equipo perdedor de hace un mes, quisieron incluso mandar en el juego con un gran Cabezas y unos explosivos Xavi Ventura y Marc Sola, éste un jugador cuya calidad no es propia de la categoría. La igualdad en cancha fue la nota dominante hasta entonces, con un Cáceres en el que Sam Jones ponía la magia y El Pollito los contrastes.

Pero en el tercer cuarto, un enorme Gruber y un inspiradísimo Busciglio se asociaron en la doble faceta y propiciaron el despegue (69-60) en medio del festejo general con una renta que subió hasta los 16. Solamente la relajación local propició que se acortaran las distancias ya en medio de un calamitoso arbitraje, que compensaba claramente a los locales las erróneas decisiones anteriores.

El Cáceres había solventado sin alardes su segundo encuentro consecutivo en casa y casi se había asegurado jugar el play off. La fase final de mayo-junio está más cerca, aunque el camino sea, aún, muy largo.