La Federación Francesa de Fútbol sancionó ayer con 18 partidos sin jugar con la selección nacional a Nicolas Anelka, con cinco a Patrice Evra, con tres a Franck Ribéry, con un a Jérémy Toulalan y perdonó a Eric Abidal, por el motín de los internacionales durante el Mundial.

Anelka y Ribéry no acudieron a declarar. Ante la comisión de disciplina sí se presentó el ex seleccionador Domenech, y el ex presidente de la Federación, Jean Pierre Escalettes, quien dimitió tras el escándalo mundialista. La FFF pedía explicaciones a Evra como capitán e instigador de la huelga, y Anelka, por haber insultado a Domenech. A Ribéry se le achacaba la responsabilidad de haber portado el brazalete de segundo capitán durante el Mundial y a Toulalan que su jefe de prensa pasara el comunicado que anunciaba la huelga.