El cacereño Bole será uno de los protagonistas del derbi extremeño del fútbol sala que tendrá lugar el sábado y más todavía porque el otro ex de la AD Extremadura que milita en el Delta Badajoz, Kike Barroso, será baja por lesión. La cita se presenta emotiva, pero sobre todo equilibrada.

--¿Cómo es enfrentarse al equipo en el que ha estado prácticamente toda la vida?

--Pues... Algo extraño, sí. A la Asociación Deportiva Extremadura le tengo mucho cariño, he estado muchos años y he vivido muchas cosas en ese club. Pero lo más importante del partido no será eso, sino que sirva para estimular la afición por el fútbol sala en la región.

--Mirando hacia atrás, ¿era lo mejor para su carrera marcharse?

--Sin duda. Aquí en Badajoz estoy muy contento. Necesitaba un cambio en mi carrera y la llamada de Badajoz me vine muy bien. En División de Plata con el Extremadura apenas tenía minutos y tuve que bajar a jugar a Primera A. Luego conseguimos el ascenso y estoy jugando en Plata. Me ha salido bien.

--¿Es cierto que estuvo a punto de volver el pasado verano?

--Es verdad. Me llamó Fermín Naranjo, el presidente del Extremadura, y me dijo que tenía las puertas abiertas, que estarían encantados de que volviese. Se lo agradecí, pero éste es mi sitio, estoy disfrutando del fútbol sala ahora y no acepté.

--¿Quién es el favorito en el choque del sábado?

--Pues... No sé. Favorito será el que gane, porque llegamos con números bastante igualados y creo que el partido también lo será. Nosotros tenemos que mejorar en defensa, porque encajamos muchos goles, aunque también hagamos muchos, y en eso estamos trabajando sobre todo esta semana con el entrenador.

--¿Qué clave intuye?

--Precisamente ésa. Si conseguimos mantener nuestro nivel ofensivo, ya que normalmente estamos muy acertados en casa, y tenemos menos errores en defensa, creo que podemos ganarles, aunque es un rival duro que lo está haciendo bien.

--Los resultados del Delta están por debajo de lo esperado, ¿no?

--La directiva lo que nos ha pedido es la permanencia y de momento estamos fuera de los dos puestos de descenso. Nuestro entrenador nos pidió que fuésemos a tope en el último partido ante El Escorial porque era muy importante para salir de ahí y lo sacamos adelante.

--Es una moda que se instauró en el fútbol, pero... ¿lo celebrará si marca?

--No lo sé. Depende del momento. Intentaré calmar mis emociones porque hay que tenerle un respeto a los equipos en los que has estado.