BARCELONA: (21+24+12+19) Jasikevicius (9), De la Fuente (7), Bodiroga (17), Fucka (21), Dueñas (1) -equipo inicial-, Femerling (4), Varejao (2), Rodríguez (7) y Navarro (8).

CSKA MOSCU: (25+13+22+11) Holden (21), Hatzivrettas (8), Khryapa (6), Panov (-), Alexander (13) -equipo inicial-, Bashminov (4), Monya (3), Songaila (14), Pachoutine (-) y Papaloukas (2).

ARBITROS: Pitsilkas (GRE), Rems (SLO) y Belosevic (SYM). Sin eliminados.

INCIDENCIAS: Segunda semifinal de la Final a Cuatro de la Euroliga. Los 16.670 aficionados que asistieron son récord de asistencia a este complejo deportivo.

Gregor Fucka, el italo-esloveno que llegó con cartel de figura y ha sido centro de críticas durante la temporada a la sombra siempre de Dejan Bodiroga, reivindicó hoy su protagonismo en el Barcelona y contrarrestó los 21 puntos de John Robert Holden, el anotador del CSKA, con otros tantos que catapultaron a su equipo a la final de la Euroliga.

La afición barcelonista, mayoritaria, entusiasmada, pero siempre con las anteriores ocho derrotas en finales europeas en la memoria, tuvo que sufrir en este primer duelo, porque el conjunto de Dusan Ivkovic bordeó siempre la sorpresa de la que le veían capaz los especialistas.

Los seguidores del Barcelona pudieron respirar tranquilo sólo lo que duró el 2-0 con el que se abrió el partido, porque, de inmediato, el CSKA Moscú mostró sus credenciales y, gracias a las facilidades para hacerse con el rebote ofensivo, obtuvo rápidas ventajas que alcanzaron los diez puntos a los cinco minutos de partido (5-15).

El equipo de Svetislav Pesic no empezó a levantar cabeza hasta que comenzaron las rotaciones en ambos conjuntos y, aunque llegó a situarse a un solo punto tras un triple de Nacho Rodríguez (20-21), las penetraciones de un John Robert Holden al que nadie podía parar hicieron suficiente daño como para que el CSKA acabase el primer cuarto cuatro puntos por delante (21-25).

LA INICIATIVA, AL FIN

La historia varió en el segundo periodo, en el que Rodríguez se situó sobre Holden para bloquear a los rusos y permitir que el Bar§a le diese la vuelta al marcador (28-27, min.13).

Sin embargo, el CSKA reaccionó de inmediato con dos triples de Sergey Monya y Darius Songaila que pusieron al conjunto ruso con ventaja de cinco puntos (30-35). Al Barcelona le costó menos equilibrar de nuevo el tanteador (37-37, min.17), después de una técnica señalada a Ivkovic, y obtener una notable diferencia de siete puntos (45-38) al descanso.

Un ataque fluido en la reanudación permitió a los jugadores de Pesic alcanzar una máxima de nueve puntos (50-41) en los primeros compases del tercer periodo y llegó entonces una ocasión inmejorable para escaparse en el marcador, pero los azulgrana la desaprovecharon.

Como pulmón del CSKA repitió Holden y él solo fue capaz de poner al cuadro ruso con ventaja de tres puntos al término del tercer cuarto (57-60). El Bar§a necesitaba una que le marcase el camino de la final en el último y decisivo periodo y apareció entonces la figura de Fucka. Anotó para poner a los suyos por delante (65-64) y, poco después, aumentó a cuatro puntos la diferencia con un dos más uno (68-64).

A partir de entonces, los barcelonistas sólo rentabilizar esa ventaja para hacerse con el triunfo, aunque, para ello, precisó de un robo de balón a cargo de Navarro con 70-68 en el marcador y posesión rusa. Su canasta sería definitiva.