Es uno de los futbolistas más desequilibrantes que ha tenido un club extremeño a lo largo de toda su historia. Y el líder del Club Deportivo Badajoz. Alberto Sansinena Chamorro, Tete (Badajoz, 26-5-1985), es magia, talento, calidad y humildad, y solo por ver sus velocísimas galopadas por la banda izquierda, superando a cuantos adversarios le salen a su paso, merece la pena pagar una entrada.
"Aquí me tratan como si fuese el hijo de cada persona que va al campo", asegura Tete a este diario para añadir que "me siento muy orgulloso de ser pacense y jugar en el Badajoz, el único equipo de Extremadura que me ha dado la confianza para demostrar lo que realmente puedo dar".
Tete va de derbi en derbi. Su equipo ganó al Extremadura, cayó ante el Cerro de Reyes y el domingo se mide al Cacereño, equipo en el que militó una temporada. "Allí se portaron muy bien conmigo; estuve un año muy feliz, aunque en el tema deportivo estuvimos abajo, pero a nivel personal estoy muy agradecido al club", declara.
El media punta albinegro recuerda que era su último año de juveniles. Empezó en División de Honor y jugó toda la segunda vuelta en Segunda B, a las órdenes de Ismael Díaz. "Venía del Atlético de Madrid y disputé unos 20 partidos, pero por desgracia, descendimos".
El del Cacereño es el partido más inmediato y atrás queda la derrota del miércoles con el Cerro. "El vestuario está muy dolido porque no nos merecimos perder. Estoy contento con mi actuación a nivel personal, pero me queda el disgusto por la derrota. Lo positivo es que el equipo dio la cara, la afición nos animó durante los 90 minutos y eso nos da más fuerzas para trabajar día a día y el domingo ante el Cacereño darles una alegría". Tete advierte que será un choque difícil "porque el Cacereño ha hecho un buen equipo. El partido será bonito y espero que ganemos", dice.
