Los miembros del llamado G-30 acordaron ayer por unanimidad paralizar el comienzo de la Liga de fútbol y emplazar a la empresa Sogecable a una reunión el próximo lunes con el fin de acercar posturas en la negociación por los derechos televisivos.

El G-30, en la Asamblea General Extraordinaria que celebró ayer en la sede de la Liga de Fútbol Profesional, admitió que la diferencia entre la oferta de Sogecable --84 millones de euros-- y lo que piden los equipos es de 9 millones de euros. Además, aprobaron la unificación de horarios y no han autorizado la venta de los derechos internacionales.