Juan Carlos Pérez López no es, desde luego, un nombre de esos que se queden en la mente. Pero a este extremo extremo nacido el 20 de marzo de 1990 siempre le quedará un dato y un mote. ¿El dato? Es el primer canterano en debutar en competición oficial con el Real Madrid de José Mourinho. ¿El mote? Por su rapidez y lugar de nacimiento, la prensa ya se ha apresurado a llamarle El Galgo de Boadilla .

Mañana será una de las atracciones del partido que disputarán el Cacereño y el Real Madrid Castilla en el Príncipe Felipe (17.00 horas), justamente siete días después de que saltase al campo en los últimos minutos del choque del Bernabéu ante el Deportivo (6-1).

"Es un jugador muy rápido, al igual que el hombre de la otra banda, Juanfran. También Sarabia en la media punta nos puede dar muchos problemas", advirtió ayer el entrenador verde, Manolo Sánchez. Después del empate ante el Rayo B el pasado sábado (0-0), se quedó en Madrid para ver el día siguiente en Valdebebas el Castilla-Cerro de Reyes, con el consabido repaso del filial a los pacenses (3-0). Toda una advertencia.

"Está claro que es un equipo con mucha calidad, con mucha pegada en los metros finales. Atrás quizás han tenido más dudas, pero tienen gente con mucha envergadura. Ganarle de esa manera al Cerro les habrá dado mucha confianza", aventuró Manolo, que no ha podido recuperar esta semana a ninguno de sus lesionados (Abel Segovia, Chapi, Tomás y Rai), aunque espera poder contar con los tres primeros a partir del lunes.

Motivación extra

El Real Madrid Castilla llegará a Cáceres tras una semana desde luego atípica. La desbandada de internacionales en el primer equipo ha propiciado que Mourinho eche mano de muchos jóvenes para completar sus entrenamientos. Tanto fue así que ayer mismo el que dirigió la sesión del Madrid fue el técnico del filial, Alejandro Menéndez. Además, el jueves hubo un partidillo de 70 minutos en el que se mezclaron ambas plantillas y que acabó con 1-1.

Juan Carlos no es la única perla de la cantera blanca, pero sí la que más ruido ha hecho hasta ahora. "Debutar en el Bernabéu es increíble", cuenta a la web del club sin perder el realismo: "Tengo que seguir trabajando en el Castilla, que es mi equipo, y estar al cien por cien como si nada de esto hubiera pasado". Seria amenaza para un equipo que lleva 414 minutos sin encajar un gol.

El Cacereño llega tras sacar un punto valioso ante otro filial, el del Rayo, aunque sabe que para surgir de las profundidades de la tabla lo que necesita son victorias. Manolo prefiere aplazar el debate del acierto ante la portería rival. "Aunque fuese por 1-0, ganar sería fabuloso", proclamó.