El Doctor no estará solo. "Rossi va a descubrir en el 2004 lo difícil que es enfrentarse a Honda", ha dicho Max Biaggi. Sete Gibernau es más amistoso. "Si tenía la mejor moto era porque era el campeón. Se la merecía". Supermax y el nieto de don Paco Bultó se han convertido así en los preferidos de Honda, en espera, dicen, de que Barros ocupe la plaza que el pentacampeón ha dejado en el equipo oficial de la marca alada. Sete está convencido de que habrá igualdad en el trato. "Honda nos dará la misma moto a los seis pilotos oficiales".

Mamola ya tiene sus favoritos. "Max y Sete tienen las de ganar en el 2004". Y habla con argumentos. "Sete ganó cuatro grandes premios en el 2003, pero si quitamos a Rossi de lo más alto del podio, hubiese ganado ocho carreras. Ahora, pues, a los 31 años, ha llegado su momento".Gibernau y Checa competirán bajo una enorme presión. Sete, porque se convertirá, junto a Biaggi y, tal vez, Barros, en el líder de Honda. Y tendrán la obligación de ganar. Porque también ellos saben que la RC211V sigue siendo la mejor moto.

"No tengo miedo a nada ni a nadie. Sé que Honda me dará el mejor material y he demostrado ser capaz de ganar a Rossi",