VALENCIA: Cañizares, Curro Torres, David Navarro, Caneira, Moretti, Marchena, Baraja, Fiore (Xisco,m.88), Rufete (Angulo,m.82), Aimar y Mista (Corradi,m.79).

LEVANTE: Mora, Pinillos, Culebras, Alexis, Jesule, Rivera, Celestini, Ettien, Manchev (Reggi,m.84), Jofre (Nacho,m.67) y Sergio García (Congo,m.67).

GOLES: 1-0,m.53: Baraja. 2-0,59: Mista. 2-1,m.73: Congo.

ARBITRO: Teixeira Vitienes (colegio cántabro). Amonestó por el Valencia a Caneira, Angulo y Marchena y por el Levante a Pinillos, Nacho y Alexis.

Un gol fantasma, el segundo del Valencia, concedido por el árbitro tras un remate de Mista que atrapó Mora en una acción muy confusa, sirvió al final para que los puntos se quedarán en Mestalla en un derbi intenso y nivelado. Tras una primera mitad igualada, los locales llevaron la iniciativa en buena parte del segundo tiempo, hasta que, tras el 2-1, fue el Levante el que tomó las riendas del juego en pos del empate.

La primera parte se disputó a muy buen ritmo y fue especialmente disputada, como corresponde a un encuentro de estas características, ya que ambos equipos movieron mucho el balón ante dos defensas bien armadas, que daban muy pocas opciones a los atacantes.

La segunda mitad dio comienzo con la misma tónica y como consecuencia de la lucha constante por la posesión de la pelota, un balón robado por el Valencia en el centro del campo propició un centro de Rufete que, de cabeza, Baraja envió al fondo de la red del equipo levantinista cuando se cumplían 53 minutos.

La jugada polémica del partido se produjo seis minutos después en un remate de cabeza de Mista que Mora detuvo sobre la línea de meta, en una acción en la que el árbitro concedió el gol entre las protestas del Levante.

El encuentro se abrió, el Valencia encontró más espacios, Aimar envió un disparo al larguero, pero el rival buscó más profundidad con dos sustituciones y consiguió marcar en el minuto 73 por medio de Congo.

Con este tanto, el Levante se metió en el encuentro y al Valencia le afloraron los nervios, pero el encuentro ganó en interés para el espectador, ya que los últimos fueron vibrantes, como consecuencia de lo incierto del marcador y con alternativas constantes ante una y otra portería.