Ni el mismísimo Hitchcock habría improvisado tanto suspense para un final así. Pablo Gómez se adjudicó el sábado el XXXIV Rally de la Vendimia, y se llevó junto a su copiloto Gregorio Parra su tercer botijo de plata. Fue tras una durísima pugna con Isidoro Jiménez que parecía decantada a favor del almendralejense justo antes del último tramo cronometrado.

Tras él, el piloto guareñés había sentenciado merced a una inoportuna avería eléctrica en el vehículo de Jiménez, quien no se podía creer lo que le había pasado por segunda vez en esta tradicional cita.

Ediciones atrás, y en un tramo en La Morera, se salió estando ya en un enlace entre pruebas y cuando tenía también todo a favor. El piloto confesó a este periódico que casi no podía creer lo que le había sucedido. Su rival, y ganador final de la prueba, reconocía la mala suerte de Isidoro y argumentaba que ambos habían hecho un gran rally aunque sólo podía ganar uno.

Jiménez había controlado prácticamente toda la prueba y tocaba con la punta de los dedos el botijo. Atesoraba una sensible ventaja cuando se abordaba el último tramo en Montemolín y se percató de que fallaba el sistema eléctrico. Tras varios cambios de batería, que resultaron estériles, se quedó a oscuras a poco de entrar en el trazado y hubo de completarlo con sendas linternas. Al llegar al control-stop había perdido la carrera.

Rovira, campeón

En esta edición del ´Vendimia´ había varios rallys en uno. El que disputaron Gómez y Jiménez, el que corrió el placentino Cándido Rovira, que llegó con ventaja en el campeonato de Extremadura de pilotos y al que casi le bastaba con terminar para asegurarse el título. Y lo hizo, por el mismo precio se llevó él el regional y su copiloto, Morcillo, el de su especialidad. También estaban los pilotos locales, cuyo principal, objetivo era terminar la carrera y llegar sin novedad añadida de regreso a Almendralejo.

Claro que otros lo pagaron teniendo que retirarse en los distintos tramos de los que constó la decana prueba del automovilismo extremeño. Igualmente fue protagonistas el numeroso público que abarrotó las cunetas de las diferentes carretera del sur de la región por las que discurrió el Rally de la Vendimia en esta 34 edición.