Unas conversaciones telefónicas entre el asesor de Jan Ullrich, Rudy Pevenage, y el ex masajista de T-Mobile Jan D'Hont refuerzan los indicios de que el ex ciclista incurrió en prácticas de dopaje.

D'Hont, que ha reconocido hace ya bastante haber desempeñado un papel en las prácticas de dopaje, grabó en secreto esas conversaciones y se las ha facilitado tanto a la fiscalía de Bonn como a la revista "Focus". La conversación clave es sobre la estrategia de defensa de Ullrich ante las acusaciones de dopaje. "Jan siempre ha dicho que nunca recurrió al dopaje", dijo Pevenage en la conversación citada por la revista. "Hubiera sido mejor que no lo dijera nunca", respondió D'Hont ante lo cual Pevenage mostró acuerdo y repitió casi la misma frase.

En la conversación Pevenage dice que Ullrich en 1996 tomó EPO "lo mismo que hacían todos". Además, Pevenage, que públicamente ha negado conocer al médico español Eufemiano Fuentes, dice en la conversación con D' Hont que conoce a ese facultativo desde "hace 20 años". En su conversación con D' Hont, Pevenage lamenta una conversación telefónica que tuvo con Fuentes, por petición de Ullrich, durante el Giro de Italia de 2006.

Pevenage, a través de su abogado, admitió ante la revista que había tenido conversaciones telefónicas con D' Hont pero negó que su contenido correspondiera a lo que asegura el ex masajista. D'Hont, por su parte, asegura que las grabaciones respaldan lo que él ha dicho hasta ahora. "Jan empezó a usar sustancias dopantes en 1996. Durante el tour consumió 30.000 unidades, 2.000 cada dos días", dijo D'Hont en declaraciones a "Focus".

Las grabaciones no pueden ser utilizadas como prueba por la fiscalía de Bonn, por haber sido logradas sin conocimiento de Pevenage y sin orden judicial. Sin embargo, D'Hont ha sido interrogado exhaustivamente sobre el contenido de las grabaciones con lo que la fiscalía puede utilizarlas de manera indirecta. D'Hont dice que con su nueva arremetida contra Ullrich sólo se está defendiendo ya que el ciclista logró que se le prohibiera decir que él le había puesto inyecciones con sustancias dopantes. "Ahora Jan Ullrich me obliga a defenderme porque yo he dicho la verdad. No me dejaré humillar de él", dice D'Hont.