Ni siquiera mordiéndose la lengua pudo evitar habla de un "resultado, un gran premio, manipulado", ni siquiera respirando hondo, muy hondo antes de contestar, logró disimular su rabia. "Parece que le permiten todo" --por Lewis Hamilton, claro-- "por desgracia todo va en contra nuestra". Le duele a Alonso por él, por su equipo, pero sobre todo por la gente, por un deporte que ama. "Es una pena por todo el público que ha venido aquí. Los 80.000 espectadores que han venido aquí y han visto una carrera manipulada", señaló. Antes de su segunda comparecencia ante los medios de comunicación, Alonso tuvo tiempo de ver la repetición del momento en que Hamilton adelanta claramente al coche de seguridad. "Todos los niños que había hoy en las gradas saben que no se puede adelantar al coche de seguridad".

Decisión muy tardía

Lo que más indignó al bicampeón fueron las 20 vueltas "que son unos 35 minutos" que emplearon los comisarios para anunciar la sanción a Hamilton. De haberlo hecho antes, el inglés hubiera perdido muchas posiciones porque, al retirarse el coche de seguidad, se había agrupado todo el pelotón de coches. "No creo que se necesite tanto tiempo para juzgar una acción tan clara. Yo nunca había visto antes adelantar al coche de seguridad. No sé como calificarlo, pero nunca lo había visto antes".

Esta es también la queja de Ferrari. "Nosotros somos respetuosos con las decisiones de los jueces, pero sí hemos puesto sobre la mesa el problema. Debemos cambiar esto. No se puede tardar tanto en ejecturar una sanción", se lamentó el siempre correcto Stefano Domenicali, director deportivo de Ferrari. Debe ser cambiado si no quieren una actuación en masa de los pilotos contra el reglamento. Si Hamilton puede sacar tajada, por qué no los demás. Alonso, al menos, no seguirá el ejemplo. "No me sentiría bien haciendo algo así. Siempre hemos respetado las normas y seguiremos así, por supuesto".

No discute Alonso el momento en el que sale el coche de seguridad. Lo hace tarde, es cierto, pero sale para llevarse también detrás al coche médico, cuando un piloto accidentado puede necesitar ayuda en el mínimo tiempo posible. "Da igual quién esté pasando por meta", dijo antes de calificar de "golpe de mala suerte", el retraso de Bernd Maylander, el coche médico. "En algunas carreras, el coche de seguridad te beneficia y en otras no, depende de que momentos sea. Esta vez ha sido justo cuando estábamos luchando por la segunda posición", lamentó Alonso, que se fue muy disgustado.