SEVILLA: Palop; Hinkel, Boulahrouz (Keita, M.46), Fazio, Dragutinovic; Jesús Navas, Poulsen, Maresca (Renato, M.46), Capel; Luis Fabiano (Martí, M.70) y Kanouté.

AEK ATENAS: Moretto; Edson Ramos (Kafes, M.61), Geraldo, Dellas, Arruabarrena; Zikos (Tozser, M.90), Nsaliwa; Julio César, Rivaldo (Kone, M.66), Manduca; y Liberopoulos.

GOLES: 1-0, M.48: Luis Fabiano. 2-0, M.68: Kanouté.

ARBITRO: Lubos Michel (Eslovaquia). Amonestó a Maresca, Arruabarrena y Zikos.

INCIDENCIAS: Partida de ida de la tercera ronda previa de la Liga de Campeones.

Dos asistencias de Jesús Navas en la segunda mitad, convertidas en gol por Luis Fabiano y Fredrik Kanouté, depararon un resultado fantástico para el Sevilla en la ida de la previa de la Liga de Campeones ante el AEK, que mucho tendrá que cambiar si, en Atenas, pretende remontar la eliminatoria.

No debía estar conforme Juande Ramos con el rendimiento de sus hombres en la primera parte, puesto que cambió en el descanso a sus dos pivotes. Renato y Seydou Keita entraban.

El efecto deseado, aunque sin intervención de los relevos, llegó en forma de gol a los tres minutos del segundo tiempo, cuando Kanouté realizó una gran apertura hacia la derecha, donde aguardaba Jesús Navas, cuyo pase de la muerte fue empujado por Luis Fabiano a la red.

Navas también fue el protagonista del segundo gol. Cogió la pelota en su propio campo y superó a dos rivales sin regatearlos, simplemente con dos brutales cambios de ritmo. Al llegar al área, conservaba aún lucidez para asistir a Kanouté, que batía a Moretto con un toque sutil.

Rivaldo, cambiado por asfixia, ejemplificaba la impotencia ofensiva griega, pero Julio César, en el minuto 81, enroscaba con su pierna izquierda un balón que se estrellaba en el travesaño.

La impresión que deja el partido, más allá del susto final, es que sólo una hecatombe en Atenas puede apartar al Sevilla de la Liga de Campeones, en la que también debutó con buen pie Fernando Torres: el Liverpool ganó 0-1 al Toulouse.