CANTABRIA LOBOS 65: (14+20+21+10) Machado (12), Greg Stempin (12), Ginobili (9), Jonzen (4) y Tim Kennedy (13) -cinco inicial-, Lo Grippo (8), Pinedo (0), Esteban Martínez (7) y Sampedro (0).

CACERES DESTINO TURISTICO 80: (29+18+9+24) Javi Pérez Iniesta (2), Shea Seals (9), Jiri Okac (19), Oscar Rodríguez (12) y Pedro Rivero (18), -cinco inicial-, Javi Pérez Gutiérrez (4), Juanmi Morales (0) y Juan Pedro Cazorla (16).

ARBITROS: Castillo y Zamora-Rodríguez. Eliminado por faltas: Javi Pérez (m. 39).

INCIDENCIAS: Vigesimocuarta jornada.

El Cáceres Destino Turístico consiguió gracias a su mejor y más efectivo juego y a su gran defensa una importante victoria a costa de Lobos Cantabria, que durante todo el partido fue por detrás en el marcador y sólo en el tercer cuarto tuvo una reacción hasta colocarse a un punto del empate. Esa oportunidad la dejó escapar merced a un juego atropellado y falto de efectividad. Los extremeños celebran así la semana en la que acabaron con sus problemas económicos.

También supieron sacar rendimiento de su mejor juego contra el reloj, ya que los cántabros, a pesar de ir perdiendo por una abultada diferencia, se empeñaban en realizar largas jugadas que, en la mayoría de las ocasiones no fructificaban, pero que beneficiaban a los visitantes.

A priori, para los cántabros el Cáceres era un equipo asequible con el que resarcirse de a reciente derrota frente al Drac Inca, pero la derrota la impide mantener intactas su aspiraciones de un puesto de play-off, con lo cual este tropiezo supone un paso atrás cuando restan poco más de diez jornadas.

El partido se inició con un Cáceres que cogió una ventaja gracias a estar más acertados en los primeros tiros, mientras el Cantabria lo intentaba pero sus acciones le rentaban poco positivo (5-13), sobre todo porque se veía obligado a los tiros exteriores, ya que la zona extremeña estaba fuertemente guardada por Jiri Okac.

DOMINIO TOTAL Las acertadas acciones de Oscar Rodríguez y Pérez Iniesta se encargaban de anotar puntos y alejar aún más a los cacereños (10-21). La ventaja se disparó al final del primer cuarto (14-29).

En el segundo cuarto, el entrenador del Cantabria Lobos, Moncho Monsalve, intentó sorprender dando entrada a Pinedo y Esteban Martínez, pero el Cáceres respondió con Juanmi Morales y Juan Pedro Cazorla, además de con una pegajosa defensa que impedía a los cántabros llegar al aro mientras ellos dominaban el rebote y los tiros exteriores.

Okac se hizo dueño de los rebotes y de la zona, contribuyendo a distanciar a su equipo en el marcador, mientras que el alero Shea Seals (exjugador de la NBA en su etapa con Los Angeles Lakers) no se mostró muy fino en su debut, aunque se le vieron en algunas ocasiones rasgos de su acreditado currículum.

El tercer cuarto se inició con el Cantabria Lobos más acertado en el tiro hasta el punto de rebajar la diferencia a 10 puntos. La reacción local se mantuvo a pesar de los triples de Cazorla gracias a una defensa más agresiva que ya no dejaba pasillos y posiciones cómodas de tiro a los cacereños como en los dos cuartos anteriores.

LOS PEORES MOMENTOS Aprovechando un descanso de Okac (con tres personales), el Cantabria se acercó a cuatro (51-55), lo que levantó la alegría del público que hasta entonces no había visto buen juego en su equipo.

Del 54-56 en que Monsalve pide tranquilidad a sus pupilos cuando ya se veía cerca el empate gracias a un mejor juego bajo los tableros, se pasó reducir a un solo punto la ventaja que Cacéres tuvo. En ese momento, Ñete Bohigas hace regresar a Okac, que junto a Oscar Rodríguez, truncaron las esperanzas de los cántabros, a pesar de que éstos se pusieron en defensa individual fuerte para intentar frenar los ataques. Nos les dio resultado y además se cargaron de personales y la distancia retornó al marcador.

La reacción del Cáceres hizo que los de Bohigas se colocasen en pocos minutos en 55-62, rompiendo de manera definitiva la anterior buena racha de buen juego de los cántabros bajo la dirección de Sebastián Ginobili.

Un triple de Oscar Rodríguez distanció al Cáceres (60-70) y la dirección de Pedro Rivero hizo consolidar a diferencia. Los tiradores encontraban buenas posiciones para lanzar y encestar, pasando en pocos segundos del 61-75 a un 61-78 y al definitivo 65-80 con el que concluyó el encuentro.