Santi Pérez, del Phonak, consiguió ayer una victoria especial en la decimocuarta etapa de la Vuelta disputada entre Málaga y Granada, de 167 kilómetros, dedicada a su novia, Vanesa, fallecida hace dos años en un accidente de tráfico, mientras que Roberto Heras retuvo el maillot oro la víspera de la cronoescalada de Sierra Nevada.

Santi Pérez volvió entre los grandes después de un largo bache anímico. En Calar Alto ofreció un claro síntoma al ser segundo tras Heras y dos días después invirtió en un valiente ataque en el puerto de Monachil, a 25 kms. de meta para presentarse en solitario en Granada y abrazar el cielo como vencedor.

La general no se movió en absoluto. Heras mantuvo a raya a sus rivales. Le sigue Mancebo a 35 segundos y Valverde a 49. Santi Pérez es sexto a 3.36, con esperanzas de lograr el objetivo de salir entre los 5 primeros.

El ciclista de Grado (Asturias), de 27 años, firmó su exhibición por delante de la alta jerarquía de la carrera. Aventajó en 46 segundos a un grupo de 9 corredores, que incluía a Valverde, Luis Pérez, Mancebo, Nozal, Sastre, Heras, Piepoli y García Quesada. El pelotón principal empezó a entrar a 2.08.

AL DETALLE Pérez, quien empezó a dedicarse a la bicicleta con 17 años después de su paso por el hockey, estudió la etapa al detalle y eligió la última dificultad del dibujo para jugar sus cartas. El Alto de Monachil fue el escenario. Sastre hizo la primera selección el momento D se materializó a 3 kms. de la cima, donde el ciclista de Pino puso asfalto por medio. No hubo reacción del grupo y poco a poco rebañó 35 segundos que bastaron.