Apenas 48 horas después del batacazo del descenso a la EBA, el Habitacle Badajoz trata de levantarse y pretende volver a competir la próxima temporada en la LEB Bronce. Para ello, necesita que haya clubes que renuncien a sus plazas de la próxima temporada y que su proyecto deportivo y económico convenza a la Federación Española con el respaldo de la Extremeña.
El club espera que Pablo Alonso siga en el banquillo y configurar una plantilla completamente nueva, ya que a juicio del presidente del club, Víctor Píriz, la errónea elección de jugadores ha sido determinante en el descenso y aunque lo han intentado corregir en el capítulo de altas y bajas, no se ha podido encontrar un equipo lo suficientemente competitivo en la categoría.
"Estamos tristes por el descenso", reconoció ayer Píriz para añadir que "hemos cometido muchisimos fallos, sobre todo en verano a la hora de seleccionar jugadores. Es muy complicado corregir posteriormente estos errores, con el tema de las altas y bajas pero no se ha podido y me duele que perdamos la LEB bronce porque tenemos la segunda mejor afición de la categoría y una de las cinco mejores contando la LEB Plata. Con más de 1.500 abonados, el Habitacle no merecía este final, pero era algo que se podía esperar desde la derrota ante el Carrefour Avila".
A juicio de Píriz, el primer error fue firmar al técnico alcarreño Raúl Jiménez. "Optamos por un entrenador con poca experiencia. La plantilla se hizo demasiado rápido sin saber qué LEB Bronce nos íbamos a encontrar, si era una EBA con americanos o una LEB Plata con americanos inferiores. Tuvimos problemas como la lesión de Fran Pérez que nos imposibilitó su fichaje, muchos contratiempos desde el 9 de agosto, que todos suman, afectan y que dan con nuestros huesos en la EBA", declaró el presidente.
