El Socuéllamos tendrá el domingo en Cáceres más apoyo que el Cacereño tuvo en la ida: serán alrededor de 300 aficionados los que animarán al conjunto manchego en el partido decisivo de la vuelta de la segunda eliminatoria de ascenso a Segunda B.

El 1-0 de la ida ha animado a los hinchas ciudadrealeños a completar dos autobuses ya. Y también habrá un tercero de ‘fuego amigo’: como el centrocampista Kike Domínguez es de la localidad de Aceituna, al norte de la provincia de Cáceres, sus paisanos también se han decidido a viajar para darle su aliento.

El Cacereño al menos espera sacar un buen rendimiento económico y superar los 2.000 espectadores que hubo en el Príncipe Felipe en la primera ante el Churra. Va a buen ritmo la venta de entradas para los aficionados locales, aunque todavía tiene que haber el estirón final.