Gonzalo Higuaín, delantero internacional argentino del Real Madrid, partió en la mañana de ayer hacia Chicago, donde será operado el martes de la hernia discal que sufre, y respondió a su técnico José Mourinho, al afirmar que no sabe "quién es el iluminado".

Las críticas del entrenador del Madrid, cuando aseguró que "un iluminado" había hecho perder un mes y medio a Higuaín engañándole con tratamientos para evitar el quirófano que no han tenido resultado, tuvieron respuesta del propio jugador argentino. "No sé quién es el iluminado. Lo que pasó, pasó y yo siempre miro hacia adelante".

Higuaín acudió al aeropuerto de Barajas acompañado por sus padres y el jefe de servicios médicos del Real Madrid, Carlos Díez, que, como estaba previsto, son sus compañeros de viaje y estarán junto al jugador en todo momento.

Antes de partir mostró su esperanza en que todo salga como está planificado y pueda ayudar a su equipo lo antes posible. "Hay un solo delantero en el equipo, así que voy a tratar de llegar cuanto antes para ayudar al Real Madrid y estar a tope en el final de temporada. Aunque también tengo que cuidar mi cuerpo. Antes que futbolista soy persona", dijo.

Explicó Higuaín que ha sido una "decisión conjunta" la tomada para ponerse en manos del especialista Richard G. Fessler y ser intervenido quirúrgicamente en Chicago. "Quien me va a operar ha hablado con el médico del club y todo está preparado. Me dicen que es uno de los mejores. Los que lo han recomendado lo saben. Yo voy a tumbarme en la camilla y que sea lo mejor".

La intención del delantero argentino fue siempre la de esquivar el quirófano, por eso se sometió a un tratamiento conservador en Argentina. El mes y medio de proceso fue lo que enfadó a Mourinho. "Yo no me sentí molesto por lo que dijo", aseguró Higuaín. "No soy médico y no puedo decir si tengo que operarme o no. No sé quien es el iluminado", insistió.

"La decisión de operarme ya está tomada. No me agradan las operaciones pero es por mi bien, para pensar en un futuro de muchos años de fútbol".