El mundo del deporte no deja de sorprender por la ingente cantidad de modalidades deportivas que existen en el mundo. Pese a que parezca lo contrario, no solo de fútbol, o baloncesto, o tenis, o fórmula uno, o ciclismo vive el hombre. Hay infinitas disciplinas, desconocidas en la mayoría de los casos, a las que agarrarse para sacar pecho por los triunfos cosechados por deportistas extremeños, que viven su deporte en la semiclandestinidad.

Resulta que hay un extremeño, Juan Berjano, que ha participado a finales del mes de junio en el Campeonato el Mundo Fidam de artes marciales, consiguiendo la friolera de cuatro medallas de oro y una de plata. Pero por si fuera poco, sus éxitos han estado acompañados por el oro logrado por el también extremeño Eduardo Rodríguez, que se ha convertido en el campeón mundial en combate light contact en la categoría de menos de 70 kilos.

Suficiencia

Pero el verdadero triunfador, quien se ha llevado la gloria y ha maravillado a propios y extraños, incluidos los grandes maestros chinos, en el campeonato, celebrado en Castelldefels (Barcelona), es Juan Berjano. El pacense, especialista en Taishin-do (literalmente el espíritu del guerrero ), arrasó y fue dominó en las modalidades de katas (estilo suave con armas, estilo duro con manos vacías, musical con manos vacías y estilo musical con armas). Se quedó a las puertas --plata- en kata japonesa con armas.

Su bagaje le han servido para ser preseleccionado de cara a los Juegos de Pekín 2008, en los que formaría parte del equipo español de wu-shu, modalidad que va a ser incluida en los Juegos como deporte de exhibición.

Berjano no quiere dejar escapar esta oportunidad y buscará patrocinadores y subvenciones regionales que le permitan aceptar la invitación de la Federación Internacional de Artes Marciales para incorporarse al Centro de Alto Rendimiento de Barcelona, donde se hará, a partir de septiembre, la selección final. Su idea es hablar con la Consejería de Deportes de la Junta y ofrecer a la Oficina de la Capitalidad de Cáceres 2016 el inmenso escaparate que supone la participación de un extremeño en el evento.

"Tengo un pie puesto en Pekín. Tras mi actuación, he sido incluso invitado a ir a China a conocer a algunos e los grandes maestros, algo que he tenido que rechazar por problemas económicos. Cuatro campeonatos del mundo y un subcampeonato no se consiguen todos los días. Sería importante que un extremeño participara en Pekín 2008", subraya.

De casta le viene al galgo. Su padre fue campeón de kárate, judo y culturismo. Pero el alumno supera al maestro.