No fue un día más ayer en la vida de Rodrigo García Rena, ya que Miajadas, su pueblo, le tributó un más que merecido homenaje con motivo de su coronación como campeón de España de ciclismo sub-23. Este acto, muchas veces demorado por los compromisos de Rodrigo en toda España, tuvo lugar en el pabellón polideportivo donde se disputó un partido de fútbol sala a beneficio de la Cruz Roja.

Participaron personalidades del ámbito político, deportivo, empresario y social de Miajadas y entre los cuales estaba Rodrigo, quien no quiso faltar a la cita, más aún conociendo que toda la recaudación será donada a las víctimas del maremoto en Asia, y se vistió de corto para demostrar que como futbolista es un gran ciclista, aunque haciendo la bicicleta no hay quien le iguale.

En el descanso del partido, el alcalde de Miajadas, Antonio Díaz Alías, hizo entrega de una placa recordatoria y el público aprovechó para darle en vivo un enorme aplauso y una ovación a su campeón.

"Me siento muy orgulloso de haber jugado aquí con la gente de mi pueblo. Muy bonito todo, muy bien organizado y con mucho apoyo por parte de la gente", explicó García, que reconoció que "de futbolista tengo poco. Hacía muchos años que no tocaba una pelota y eso se ha podido ver en la pista".Su satisfacción no tenía límites:

"Uno se siente muy bien cuando ve a sus amigos, a sus vecinos, a su gente ahí apoyándote. Es algo realmente muy bonito y que me llena de alegría y de orgullo".Ahora se marcha a una concentración en Calpe con su nuevo equipo, el Kaiku de Pamplona. Después, acudirá a Mallorca a participar en la Challenger del 6 al 10 de febrero.