Parece que cuando van en pelotón nadie sufre y todos se dejan llevar por el rebufo de las bicicletas que los preceden en el grupo. ±Pero yo ya he visto a mucha gente con manchas de sudor blanco en el maillot, como de salitre, prueba de que ya van al límiteO. Carlos Sastre lo avisó el viernes. Conocedor del Tour, astuto, corredor que no da una pedalada en falso, el abulense adivinó desgaste, almas en pena que ya no pueden más. Y ayer, en un primer test en la montaña, de puro contacto y marcaje entre los favoritos, ya se observaron hundimientos sorprendentes, antes de que hoy la cumbre de Avoriaz marque la hora de la verdad alpina.

Los montes del Jura no son los Alpes. Sus rampas no tienen por qué entorpecer innecesariamente las piernas de las grandes figuras. Andreas Klöden, lugarteniente de Lance Armstrong, no aguantó el ritmo que impuso el pelotón principal, conducido en varias ocasiones por los ayudantes del Astana de Alberto Contador. "Se ha vaciado. Se ha quedado sin fuerzas", fue la respuesta que dieron de Klöden en el conjunto del RadioShack.

LOS DERROTADOS Las rampas del Jura hundieron también a Tony Martin, el líder del Columbia, la gran esperanza alemana para luchar por la general de la grande boucle en este Tour. 19 minutos se dejó en Les Rousses. Menos sorprendente fue comprobar como Vladimir Karpets, igual de bueno que de irregular, perdía contacto con el pelotón. Su desfallecimiento sirvió ayer, a las primeras de cambio, para que quedase claro en el conjunto del Katusha que el jefe de filas es el catalán Joaquim Purito Rodríguez, que ha debutado en el Tour con aspiraciones de pelear por la clasificación de París.

Fue una tremenda alegría comprobar con qué desparpajo se movió ayer en las posiciones de privilegio de la ronda francesa Rafael Valls, un joven valenciano de 22 años, que corre en el Footon-Servetto, conjunto español que heredó la infraestructura del desaparecido Saunier Duval y que pasa por ser el conjunto más débil de este Tour. Pues bien, Valls ayer terminó la etapa de Les Rousses en segunda posición por detrás del nuevo líder, Sylvain Chavanel.

Hoy todo será distinto. Hoy el Tour no estará para bromas. Hoy se resolverá el dilema de Contador, sexto desde ayer: ¿ataco o me sereno? Hoy se verá hasta dónde es capaz de llegar Armstrong y si realmente sus referencias en la montaña, sobre todo Klöden, pero también el ucraniano Yaroslav Popovych, llamado a ser el corredor que debe sacrificarse en primer lugar para el tejano, están mal o decidieron levantar el pie al ver que no andaban finos para no desgastar más fuerzas de lo necesario de cara a la trascendental etapa de hoy, en el mismo lugar en el que Piotr Ugrumov, un corredor letón con cara de viejo, puso en aprietos a Miguel Induráin.