La presencia, estos días en Las Hurdes, de los pilotos Sebastian Loeb y Daniel Sordo, ha despertado pasiones, pero también expectativas. Que el pentacampeón del mundo de rallys y la gran esperanza española capitalicen con su estancia el interés social y periodístico después de que este diario destapara la noticia ha abierto una nueva e inesperada puerta de esperanza para la comarca con miras a un futuro desarrollo y a reforzarse aún más como uno de los principales destinos regionales para el turismo nacional e internacional.

De hecho, ayer, los alcaldes de tres de los municipios donde esta semana los pilotos entrenan con sus Citroen --Caminomorisco, Pinofranqueado y Casar de Palomero-- ya celebraban que el hecho de que deportistas de élite se preparen en Las Hurdes permite avanzar con pasos gigantescos.

El alcalde de Pinofranqueado, José Antonio Caldoria, destaca la importancia de la presencia de gente importante "en una zona marcada entre comillas por la historia negra", señala. De hecho, Caldoria dice que Dani Sordo ya le ha transmitido su intención se volver a visitar Las Hurdes este mismo año como un turista más.

En este mismo sentido se pronuncia la alcaldesa de Caminomorisco, Soledad Gómez, que recalcó que la gente "tiene que quitarse ya esa idea de pobreza cuando oye Las Hurdes" y asegura que la visita de los dos pilotos es un claro ejemplo de que la comarca tiene sus brazos abiertos a todo el mundo y que este tipo de ocasiones "son una gran oportunidad para mostrar la riqueza medioambiental", afirma. "Les hemos agradecido que se hayan acordado de nuestra comarca y se la hemos ofrecido no solo para próximos entrenamientos, sino también para que vengan a pasar unos días de descanso porque tenemos verdaderas joyas para enseñar", añade.

En este caso, no hay mal que por bien no venga, porque quién podía pensar que las antiguas y casi intransitables carreteras por las que tenían que circular los hurdanos hace unos años, ahora son los escenarios demandados. "Para ellos la carretera ahora en desuso que une Caminomorisco con Casar de Palomero es excelente, es un tramo con muchas curvas, es como una culebrilla", explicó la alcaldesa.

El alcalde de Casar de Palomero, José Antonio Arrojo, expresa su satisfacción. "Es un orgullo que gente de prestigio venga a nuestros pueblos", se congratula. Arroyo añade que ello "impulsa una comarca un poco deprimida en cuestión de trabajo y además es una oportunidad para que nos conozcan no solo en España, sino también internacionalmente", subraya.