Plasencia: Romero, David (min. 63, Juanfran), Santos, Haro, Jandri, Carlos, Fran Díaz (min. 45, Edu), Escalante, Rai, Manolo (min. 65, Boceta) y Hugo Fuentes.

Cacereño: David Macías, Antonio, Merino, Paco Ortega, Chico, Gabi, Gervasio, Pelegrín (min. 79, Adán), Borrallo, Juan Alfaro y Rocha (min. 69, Sergio).

Arbitro: Iglesias Pintor (0). Expulsó con roja directa a los locales Romero (45´) y Rai (61´) y por doble amarilla al visitante Merino (53´). Amarillas al local Escalante y a los visitantes Paco Ortega, Juan Alfaro y Rocha.

Incidencias: 600 espectadores en las gradas del Municipal placentino, entre los que había una veintena de aficionados verdes. Temperatura agradable y terreno de juego en buenas condiciones para la práctica del fútbol.

Plasencia y Cacereño protagonizaron un derbi con sabor clásico. Hubo poco fútbol, menos goles y sí mucha polémica por el nefasto arbitraje de Iglesias Pintor, al que sus asistentes echaron una mano para redondear una tarde bochornosa.

El equipo placentino, que partía con su mejor clasificación y el cacereño, que estaba más necesitado que su rival, dilucidaron un encuentro poco vistoso, aunque no falto de intensidad y emoción por la incertidumbre del resultado, aderezado con dos expulsiones polémicas por el bando local y una por el visitante.

Tanto UPP como Cacereño saltaron al terreno de juego con el mismo dibujo táctico, un 4-2-3-1, que se quedaba en un exceso de juego en el centro del campo, sin que los teóricos enganches ni los hombres de banda tuvieran excesivo contacto con el balón. El Cacereño se dedicaba más a buscar balones largos, mientras que el Plasencia trataba de llevar el balón raseado desde atrás.

En el primer tramo se repartieron una ocasión para cada bando, aunque ni Rocha, por los visitantes, ni Rai, por los locales, acertaron con el objetivo del gol. Este tanteo inicial prometía espectáculo, pero pronto remitió el empuje en los dos rivales. El Cacereño llevaba la iniciativa merced a su presión, aunque el Plasencia trataba de contrarrestarla con orden defensivo.

A medida que corrían los minutos, la UPP se hacía con la manija del juego, mientras que el Cacereño se supeditaba al descomunal trabajo de Rocha y Borrallo. En un balón largo al canterano verde, éste cedió a Pelegrín y el meta Romero le derribó dentro del área. El penalti fue claro, aunque el error vino en el castigo de la tarjeta roja al meta placentino, ya que Pelegrín no dribló en dirección al gol y además ya había dos defensas detrás de Romero.

José Mari Calvo dio entrada al meta suplente Edu por Fran Díaz, pero Juan Alfaro envió el máximo castigo muy por encima del larguero local.

SEGUNDA MITAD El Plasencia afrontaba en inferioridad numérica la segunda mitad, pero a los ocho minutos se igualaron las fuerzas, pues Merino vio la segunda amarilla por protestar una acción, que concluyó con un zurdazo de Jandri que David Macías atajó. En la contra, el Cacereño respondió con una jugada de Borrallo que finalizó con un disparo que se estrelló en la base del poste de Edu (minuto 55).

De nuevo se desequilibraría la igualdad numérica tras expulsar Iglesias Pintor al local Rai por una entrada sobre Antonio, que el propio lateral verde consideró como más que rigurosa sobre su paisano de Torreorgaz. Justo en la jugada anterior, de nuevo el explacentino Borrallo había disparado al palo del meta Edu.

Hasta el final continuó el desaguisado arbitral, aunque en el juego parecía que el que estaba en superioridad era el Plasencia, pues el Cacereño ofrecía una lamentable imagen pese a jugar con uno más, pues se dedicaba a buscar el contragolpe como única arma y con tiros lejanos sin apenas puntería.

Los puntos pudieron quedarse en casa de no ser por la actuación de David Macías, que a duras penas y con la ayuda de la escuadra detuvo un nuevo latigazo de Jandri en el descuento.