Enfado. Indignación. Decepción. Y, finalmente, reacción. Al Cáceres 2016 le escuece enormemente su novena derrota consecutiva, que se produjo en la tarde del sábado en Ourense en circunstancias poco menos que dantescas. El club señala a dos culpables: los árbitros Juan Gabriel Carpallo y José María Terreros, a los que acusa de equivocarse decisivamente en los últimos segundos del tiempo reglamentario y de la prórroga, que acabó con un resultado de 82-80.

Tanto es así que se está estudiando presentar una reclamación ante la Federación Española de Baloncesto. El escrito especificando la situación iría acompañado de un vídeo en el que se resaltan sobre todo dos jugadas, ambas comentadas ampliamente por los aficionados y que deben ser analizadas exhaustivamente.

LAS DOS ACCIONES La primera se produce al final de los 40 minutos. Con 70-73, y faltando 15 segundos, el Ourense tiene el balón. La orden de Piti Hurtado es hacer falta para que el rival lance dos tiros libres, pero la circulación del balón es rápida y cuando Piru Ros se levanta para tirar de tres, Félix Ortiz le cae encima y son tres tiros. El Cáceres no lo ve así y cree que la acción es anterior.

Después, en la prórroga Hurtado también protesta airadamente la falta que se le pita a Alberto Aspe en el medio del campo con empate a 80 y faltando 4 décimas. Ros transformó los dos tiros y ya no hubo tiempo para más.

En su página oficial, el Cáceres 2016 llega a afirmar que "se nos está perdiendo el respeto en algunos organismos" y menciona otro dato respecto al arbitraje: mientras los gallegos fueron a la línea de tiros libres 23 veces, los extremeños solo lo hicieron en 8.

Todos saben que si se presenta la protesta ante la federación no habrá ninguna consecuencia tangible como la repetición de los últimos segundos del partido. La intención es sobre todo hacerse oír , reclamar un mayor respeto de los colegiados.

Club y afición están deseando ansiosamente que llegue el parón navideño de la competición. Antes hay que jugar ante otro de los equipos de abajo, el Prat. Será el próximo viernes (21.00 horas) con, de nuevo, la necesidad imperiosa de victoria.

Pase lo que pase esa noche será el último partido del interino Hurtado en el banquillo y posiblemente también el de uno o varios jugadores. Pese a que la imagen ha mejorado en los dos últimos partidos, se le quiere dar un giro radical al equipo tras evaluar sus carencias.