REAL MADRID 2: Casillas; Míchel Salgado, Pavón, Raúl Bravo, Roberto Carlos; Beckham, Helguera; Figo (Miñambres, m.46), Raúl, Zidane; y Ronaldo (Solari, m.87).

DEPORTIVO 1: Molina; Manuel Pablo (Víctor, m.60), Naybet, Andrade, Capdevilla; Sergio, Duscher; Scaloni, Valerón, Luque (Munitis, m.82); y Tristán (Pandiani, m.63).

GOLES: 1-0, m.45: Ronaldo. 1-1, m.64: Pandiani. 2-1, m.85: Raúl.

ARBITRO: Julián Rodríguez Santiago (Comité Castellano-Leonés). Mostró tarjeta amarilla a Manuel Pablo (m.19), Pandiani (m.67) y Andrade (m.87), Scaloni (m.90) y Beckham (m.90).

Raúl González sacó de un apuro al Real Madrid, firmó el gol que dio el triunfo a su equipo ante el Deportivo y consiguió que el Santiago Bernabéu siga siendo un feudo inexpugnable en esta Liga, en la que ningún equipo ha conseguido salir del coliseo blanco sin una derrota.

El capitán madridista ofreció una actuación sobresaliente. Fue el mejor y acalló las críticas que ha recibido en los últimos tiempos. Nunca se puede dudar del delantero madrileño, un futbolista que siempre acude al rescate cuando más se le necesita.

MAS CONTUNDENCIA Raúl hizo posible que el Madrid cosechara tres puntos que le sirven para afianzarse en el liderato, con dos de ventaja sobre el Valencia, y para distanciarse del Deportivo, que se queda a seis.

Impulsado por la batuta de Valerón, el trabajo incansable de Sergio, la firmeza en defensa y la velocidad de Luque, el Deportivo fue un adversario de mucha entidad, pero le faltó pegada.

En un primer tiempo trepidante, hubo un gol anulado a Luque (m.26) por un inexistente fuera de juego, y otro a Helguera (m.31) por una falta previa.

Antes del descanso, Zidane, en la izquierda, recibió un balón por alto en profundidad, lo controló como sólo él sabe hacerlo, ganó la posición a Manuel Pablo, que se resbaló y quedó por el camino, y dio un pase a Ronaldo que fue medio gol. La otra mitad la puso el brasileño.

El Deportivo equilibró en el minuto 64, por medio de Pandiani, que convirtió en gol el primer balón que tocó. Sólo llevaba seis segundos sobre el césped.

Cuando el partido parecía condenado al empate, Raúl, que derrochó ambición durante los noventa minutos, remató a gol un gran centro de Roberto Carlos desde la izquierda.