Arranque esperanzador del Cacereño tras la remodelación vivida en el club este verano. Tres victorias y dos empates --sin derrotas-- en las cinco primeras jornadas aupan a la plantilla de Angel Alcázar a la cuarta posición de la tabla, con unos guarismos similares a los vividos hace dos años, cuando el equipo era dirigido por José Manuel. En aquella campaña, la 2006/2007, a estas alturas el Cacereño ocupaba la misma posición --la cuarta--, con los mismos puntos, aunque con un ligero bagaje goleador favorable para aquella plantilla. Ese ejercicio la trayectoria del equipo acabó desembocando en la liguilla de ascenso, aunque se cayó a las primeras de cambio con el Caudal de Mieres.

Este año, el corto balance que puede hacerse a estas alturas es prometedor. Solo se han perdido cuatro puntos, merced a dos empates, de 15 posibles, se han encajado únicamente tres goles y se han logrado nueve. Solo superados, por los 2 y 10 respectivamente de hace dos años.

Nada que ver con los paupérrimos resultados de la 2004/2005 (cuatro puntos y decimosexta plaza) o de la 2005/2006 (siete puntos y undécima plaza) inmerso el club verde en plena ´depresión´ postdescenso.

Similares resultados a los de ahora sumó Nacarino el pasado año (ocho puntos, cuarta plaza) en un espectacular inicio que le llevó a liderar la tabla en la mitad de la primera vuelta. A partir de ahí, diferentes problemas internos y estructurales del club acabaron hundiendo al equipo. Todo parece distinto hoy. Pero esto no ha hecho más que empezar y el camino es largo.